Cada 8 de marzo celebramos el Día Internacional de la Mujer. Sí, debemos seguir teniendo un día para reivindicar igualdad Real, a pesar de que nuestro Alcalde aconseje que “tendamos a acabar con el carácter reivindicativo de este día”, pero en esto señor Alcalde, no podemos seguir su consejo, pues como digo tenemos que reivindicar una Igualdad Real, conscientes de que la formal la tenemos.
No la reivindico yo, ni el grupo de mujeres agrupadas en la asociación a la que pertenezco, la reivindicación es del conjunto femenino de la sociedad, cada una desde sus creencias e ideologías y conscientes de que son muchos los hombres que nos acompañan en esta reivindicación.
Desde que empezaron las luchas por los derechos sociales, las mujeres hemos estado ahí, luchando por derechos que han mejorado la vida de ellos, luchando por mejoras sociales que han disfrutado ellos. Los movimientos feministas empezaron la lucha por los derechos de la mujer, es mucho lo conseguido, pero queda mucho por hacer.
La violencia de género, la que se ejerce contra la mujer por ser mujer, es el hecho palpable de la desigualdad. Sin remontarnos mucho, 59 mujeres asesinadas en 2014 y 6 mujeres asesinadas en los 2 meses de 2015 es motivo más que suficiente para ser reivindicativas (por ellas).
No nos queda otra que ser reivindicativas ante la brecha salarial de género. Las mujeres tenemos que trabajar 79 días más al año, para cobrar lo mismo que el hombre. Algunos lo justifican como daños colaterales de la crisis, por eso las mujeres tenemos que alzar la voz para que se sepa: a igual trabajo, diferente salario.
Tenemos que estar alerta, nos confundimos si creemos que ya lo hemos conseguido todo, porque siempre puede haber una vuelta atrás, como de hecho la estamos viviendo.
Así que señor Alcalde, si tiene que ser un día reivindicativo, no podemos bajar la guardia porque seguimos siendo la parte no más débil de la sociedad, sino la más castigada, y todo el año pero de forma más visible el 8 de marzo tenemos que reivindicar la IGUALDAD REAL.
