El pasado jueves 28 de mayo, tuvo lugar en nuestra localidad de Antequera el inicio de la Vuelta Ciclista BTT. La salida de la carrera comenzó a las 21 horas desde el Paseo Real de Antequera con una cronoescalada nocturna de 6 kilómetros por el casco histórico y barrio alto de la ciudad.
Mi sorpresa llegó cuando pude comprobar por mí misma que hasta las 23 horas de la noche no habían salido las ciclistas: ¡sí las ciclistas! Había mujeres ciclistas de un gran nivel que por una mala planificación y desconsideración machista de los organizadores salieron en la parrilla de salida después de los élite masculinos, máster 30 y máster 40.
La carrera quedó totalmente deslucida puesto que los ciudadanos de a pie sólo contemplaron hombres montando en bicicleta. La carrera pareció totalmente una Vuelta Ciclista a Andalucía en btt en la que sólo participaban hombres. Las ciclistas tuvieron que hacer su recorrido a una hora tardía, sin los pocos resquicios de luz natural que quedaban a diferencia de sus homólogos varones que salieron con los últimos rayos del sol y que claramente se vieron beneficiados por tal hecho.
Además, las ciclistas corrieron sin público que las pudiera animar y vitorear como sucedió con los ciclistas, ya que a esa hora, en un día laboral en la que los ciudadanos tienen que ir a trabajar al día siguiente, Antequera estaba prácticamente desierta.
De las ciclistas que participaron de variopintas nacionalidades muchas de ellas habían sido corredoras participantes en carreras profesionales UCI, con mucho más nivel que los corredores máster 30, máster 40 y del mismo nivel que los élites masculinos con los que sin duda deberían haber salido en el mismo horario.
Tras hablar muy seriamente con la organización, ésta pidió disculpas alegando que no se habían dado cuenta del error (lo que me lleva a entender la poca consideración que se tiene del ciclismo femenino). Hay que darles visibilidad a las ciclistas para que muchas mujeres y niñas tengan referencia de mujeres que rompen con los estereotipos de género que aún hoy día siguen cosificando a las mujeres.
Me parece aberrante el trato tan machista que tenemos que soportar las mujeres en todos los aspectos, acentuado mucho más en el deporte al estar aún reglamentado por la Ley 10/1990, de 15 de octubre, del Deporte, que no regula aspectos tan fundamentales y esenciales de la deportista como la retribución, maternidad y conciliación de la vida personal, familiar y laboral entre otras cuestiones. No obstante, existe la Ley Orgánica 3/2007, de 22 de marzo, para la igualdad efectiva de mujeres y hombres que contempla éstos aspectos pero no de una forma tan específica para que se pueda actuar de forma contundente. Actualmente, en España sólo tenemos dos equipos ciclistas femeninos (Lointek team y Bizkaia Durango) que compiten a nivel profesional con las mejores ciclistas del mundo con la salvedad de que nuestras ciclistas españolas no pueden considerarse “profesionales” al no ser asalariadas y sólo recibir retribución en concepto de patrocinio.
La situación del ciclismo femenino actual es la siguiente: pocas carreras ciclistas en el calendario nacional femenino, paupérrima organización de las carreras que se organizan, menor cuantía económica en premios e insultos sexistas y machistas que tienen que soportar las ciclistas. Lo más llamativo de todo es la indiferencia que muestra parte de la sociedad ante estos problemas y que son extrapolables a muchas mujeres en otros ámbitos y sectores. Mi pregunta es ¿hasta cuándo tendremos que soportar las mujeres tratos tan vejatorios? Está claro que la legislación vigente tiene que mejorar muchos aspectos relacionados con la deportista como “sujeto deportivo” pero también la conciencia ciudadana.