Para los que hemos tenido la suerte de pertenecer a ella, como yo, seguramente se les pasaría por la cabeza eso de que el premio del Centro de Iniciativas Turísticas a la Universidad de Málaga, tendría un capítulo, cómo no, para la Escuela de Magisterio María Inmaculada.
Para sorpresa, no estaba entre los puntos por los cuales se le otorgaba el galardón, algo que no entendemos pues es una Escuela adscrita a la UMA, y por tanto, pertenece a ella.
Suponemos que es por desconocimiento o por no caer en lo que se tiene dentro de casa para alabarlo.
Por si éste es el caso, la EUMMIA forma a futuros maestros cuyos lugares de procedencia son diversos y hay más alumnos de fuera de nuestra ciudad que de Antequera en sí. Es decir, damos cobijo a una cantidad de alumnado importante, que día tras día viven, se relacionan y trabajan en nuestra ciudad. Y no sólo eso: cuando terminan sus estudios con grandes expedientes en su mayoría, salen a trabajar fuera de aquí, muchos de ellos funcionarios y todos llevan dentro de sí a Antequera.
¿No creen que sería importante al menos el haberlo tenido en cuenta? Pienso que sí.
Pero pasa lo de siempre que lo que se tiene en casa no se valora o se desconoce… ya saben que nadie es profeta en su tierra.
Entendemos todos los aspectos que se han tenido en cuenta para otorgar este premio, pero quizá se han dejado atrás uno, porque se hace mucho más de lo que muchos piensan, y si no acérquense a conocerlo y verán que estamos en lo cierto.
