Desde que la forma y manera de hacer política en este país, que ya no sé si es producto de cómo se hace en otras partes del mundo o es made in Spain, que lo de la globalización ya nos está pesando un poquito, y aún puede empeorar, y mucho, las “celebraciones” por fijar días internacionales, mundiales, nacionales y/o autonómicos, se convierte luchas políticas “puras y duras” y cada vez más duras, que si yo no soy de feminismo de pancarta, que si yo la bandera multicolor no la pongo aquí, que yo si la pongo y me pinto el pelo de morado… en vez de luchar TODOS y TODAS al unísono por el mismo fin que tanto argumentan que es justo y necesario.
Y créanme si les digo que, lo más llamativo, es que los mismos convocantes para “luchar” por determinadas cosas que dicen que benefician a nuestra sociedad, son los mismos, repito los mismos, y las mismas, que tienen que solucionar los temas… en el día internacional del trabajo, salen a la calle, convocados por el Ministerio de Trabajo, los mismos y las mismas que tienen que solucionar lo que reivindican, en los medios de comunicación se emiten discursos por el mismo y/o la misma que tiene que solucionar lo que pide a voz en grito… no hay ya por donde coger lo que nos cuentan.
Y si hablamos de las tan manidas RRSS, apaga y vámonos… Quedémonos con el sentido común y la lógica que tiene las cosas, que cada vez es menos visto, luchemos porque todos nos sintamos igual de tratados, porque la violencia se erradique, sea contra quien sea y venga de donde venga, que cada cual ame a quien le plazca y que cada vez esta sociedad sea más justa e igualitaria…, pero créanme de nuevo que como va el sentir político, lo que cada vez más tendremos, será enfrentamiento, odio y sumisión… ¡Gracias, siempre!