Todo es grandilocuente y lo peor es que no hay un plan. Los señores del gobierno NO tienen un plan. Pluralizo, pues son bastantes los pensantes y desgraciadamente pocos los solucionantes. Porque, ¿cuál es el plan del gobierno para reducir el tremendo peso de la deuda en los próximos años cuando se inyecte el dinero, la pasta? Hay que despejar dudas, esclarecer, puntualizar, desenmarañar, despejar incógnitas amarillas. Cumbres borrascosas se llamen como se llamen. ¿Para qué las exhibiciones del G-20?
Muy cara nos sale la foto con los poderosos. Por cierto, poderosos a costa de los afanosos, que cada vez somos menos, con condiciones más duras de laboro y de cobro. Siglas las que queramos. BCE, FMI, IVA, ERE… Sigan, que encontrarán más. Yo no las colecciono porque me parecen tóxicas.
Especulación de mercados encabezados por una vociferante canciller con chaquetas de igual corte pero distinto color, que grita como una posesa: ¡¡AUSTERIDAD A CUALQUIER PRECIO!! Y un errático comportamiento de Bruselas que ha perdido la brújula bajo los escaños acomodados del hemiciclo ocupados por mentes técnicamente perfectas. Por cierto, ¿cómo consiguieron este puesto de trabajo las mentes trajeadas?, ¿tuvieron que competir en unas oposiciones con miles de candidatos? NO.
Millones de euros volando por encima de nuestras cabezas movidos por huracanes de codicia, que dejan un rastro desastroso, el de los bolsillos vacíos, el de la injusticia o el de la justicia fraudulenta y mangante. Deuda, cifras. Cartas de navegación borrosas, inciertas, para los posibles inversores. ¿Y para los demás mortales? También queremos que nos hablen con lucidez, aunque dudo que sepan de qué va esto y cuando lo hagan que demuestren respeto a otras mentes que habitan este mundo más licenciadas y doctoradas que las suyas. Vamos, que no nos traten como si fuéramos imbéciles.
Silencios que parecen haber regresado de la muerte. Creo que la bruja mala camina por los senderos de la competitividad, de la deuda soberana. Mientras, se acerca a pasos agigantados un verano caliente, seco.