Con su permiso, me presento ante ustedes. Mi nombre es María Teresa Conejo Santiago. Soy una chica simpática, me encanta leer y escribir poemas. Todos dicen que soy la más preferida del Director del Centro Ocupacional de ADIPA… y dicen la verdad.
Tiene que ser porque soy muy cariñosa. Todos mis compañeros siempre acuden a mí cuando tienen problemas. También estoy en un Grupo de Autogestores donde aprendemos a decidir por nosotros mismos. Aprendemos nuestros derechos y nuestros deberes. En mis ratos libres me gusta escuchar música y navegar por Internet. También ayudo a mis padres, Pepa y Juan Antonio, en las tareas de casa. Estoy orgullosísima de mis sobrinos que me llaman “La Tata”. Ah… se me olvidaba… soy una persona con Síndrome de Down.
Para ya basta de hablar de mí. Hoy quiero compartir con vosotros mi poema que he titulado Otoño…
Espero que os guste.
La tristeza ya ha llegado
descansa sobre hojas secas,
lentas, caen poco a poco,
la primavera ha marchado.
El color marrón la inunda,
el brillante de las gotas,
un bonito día empieza,
alma y corazón se juntan.
Derriba las hojas,
el miedo oscurece,
con mis emociones…
el viento las mece…
Otoñeando.