MARRÓN DESASTRE.-Yo digo como un diputado del mismísimo PP ”qué cosa más desagradable” y eso que salía de estar con la cúpula suprema. Hablo del video de mal gusto de la recuperación de España. Si yo tuviera un familiar en un hospital, agradecería que lo quitaran. Y como antes o después pasamos por clínicas o urgencias aunque sea por una gripe, me parece ofensivo, desagradable, de poca sensibilidad mantenerlo. Mientras Montoro corre destapando y tapando frases contra su partido y compañeros de gobierno. Cayetana Alvarez de Toledo, diputada del PP, anuncia que se va, porque no cree en, cito textualmente, “el plasma y la tecnocracia” de Mariano Rajoy. Miren, que amo el cine, es sabido, pero nunca se me ocurriría seguir a un líder de celuloide, esto se lo digo yo por escrito.
¿Y por qué se echó a llorar Nuñez Feijó? ¿Habrá intuido que se va, se va, se van? No lo sé, lo que sí vi es a Rajoy paseando tranquilamente por el Central Park, por dónde si no. Rajoy sale de España más que en sus tiempos lo hizo el baúl de la Piquer.
Dicen ellos mismos que la soberbia los corroe y que el presidente no los manda a paseo porque quedan dos telediarios para acabar la legislatura. Pues puede. ¿Cómo han llegado a esto? Digo yo que se lo preguntarán. Ellos mismos comentan que, el fallo está en los cuatro años de gobierno. Aclaro que cuando digo ellos, ellos, son el PP. Parece ser que se han dedicado a lo que se llama “alta política” hacer números para ella y dejar de lado la verdadera política alejándose de las realidades sociales. Esto es serio, no son niñerías. No me atrevo a afirmar, a sospechar, que la mayoría de sus señorías, salen pitando porque el barco se hunde, huelen el fracaso de las próximas elecciones. Pero mucho me temo que esto es así.
Los grandes politólogos, opinan que no hay sintonía entre partido y gobierno y que no hay liderazgo. Ésta es otra. Ser un líder no se fabrica de un día para otro entre cervecitas. Hay que ganarlo, conquistar, progresar, convencer, actuar…
