Antequera es una tierra de tradiciones y costumbres que se transmiten de generación en generación, enriqueciendo su riqueza popular, como lo es la festividad de San Blas.
Este año el calendario lo ha situado en domingo, por lo que muchas panaderías y establecimiento de pan adelantaron su elaboración y bendición al día previo. Así, Alimentación Juan Ignacio de la Plaza de San Sebastián, acogió al padre carmelita Antonio Jiménez, quien bendijo las roscas que los clientes encargan, pudiéndoselas llevar el sábado por la noche.
El resto de panaderías amanecieron con la visita de los sacerdotes que bendijeron las roscas, como Rico en calle Merecillas, o Entre Torres en calle Infante don Fernando. En esta última, el capuchimo padre Francisco Martínez Melero se desplazó a las 9 de la mañana para proceder a su bendición.
También los templos recibieron la visita de los vecinos que quisieron llevar sus roscas a bendecir, como ocurriera en Santa Eufemia, por el trinitario padre Domingo Reyes tras la misa de 11; o por el padre Antonio Fernández, durante la misa de 12 en San Sebastián, ante el retablo del propio San Blas, en que agradeció a la familia González-Gálvez su esmero por su conservación.