Como les señalamos, las tradiciones de Navidad en Antequera iban mutando. Aunque no habían grandes ostentaciones, las penurias económicas se iban dejando un poco atrás y la manera de vivir estas fiestas se transformaban. Estamos en la Navidad de hace 50 años, la de 1974.
La única línea que se mantiene es la ayuda y apuesta por los más necesitados. Nuestro periódico hace especial incidencia en la Campaña de Navidad promovida por el ente provincial con Carmen Campillo al frente y que se dirigirá a las residencias de ancianos de toda la provincia. Se llegó a recaudar en Antequera 200.000 pesetas con esta campaña sumando dos más organizadas por Cáritas y Cadena Ser. Se celebraron proyecciones en el Cine Ideal y Cine Torcal con sorteo de bicis, desfile de moda infantil y cuestación puerta a puerta en los domicilios y con mesas en las calles.
Tras la salida de las misas del gallo “pandas de jóvenes con instrumentos clásicos de las fechas, zambombas, panderetas, almireces, corrieron por nuestras calles en una reedición de esa explosión de alegría”, señala nuestro periódico. En sus páginas del 29 de diciembre de 1974 da cuenta también, de la inauguración el día de Navidad del XVIII Salón Nacional de Fotografía de la Sociedad Excursionista Antequerana que repartió premios para artistas de Barcelona, Elche, Madrid y Pamplona, entre otros lugares.
Para Nochevieja, resaltamos que ya había cotillones de Navidad, como el que organizó King’s Road Discoteca, situada en calle Silla, donde posteriormente tras ampliarse, se convertiría en la discoteca Rockefella. Nos llama la atención de su publicidad donde además de acompañar el cotillón con uvas de la suerte la coletilla: “solo admitimos parejas”.
Y llegamos ya a la Cabalgata de Reyes que se vivió por primera vez en el 71. Ese año los Reyes Magos iniciaron el cortejo a las ocho y media de la tarde desde la puerta del Cuartel hasta la plaza de San Sebastián. La misma la abrió la Banda de Cornetas y Tambores de la OJE de Archidona, tras ellos una carroza con un portal de Belén, los Reyes Magos a caballo y acompañados de mulos con regalos para los niños y por último, una carroza desde la que se repartían juguetes y caramelos. Antes del mismo, visitaron las Hermanitas de los Pobres.
Ya en la mañana del día 6, en la oficina central de la Caja de Ahorros, los Reyes repartieron entre niños distintos regalos –que rondaron el millón de pesetas, señala nuestro periódico–, y se había hecho previo sorteo entre todas las libretas y cuentas de la Caja adjudicando un número por cada mil pesetas de saldo que se tuviera a fecha del 25 de diciembre. Tras terminar en Antequera, los mismos se fueron a Campillos donde también se entregaron juguetes en la oficina de Caja de Antequera.