Finalizamos esta semana nuestro artículo sobre las hernias de disco y la protrusión discal. Analizamos esta semana los factores que nos ayudan a evitar una hernia discal.
– Ejercicio físico, que potencie la musculatura de la columna vertebral.
– Higiene postural, que evite traumatismos y sobrecargas.
– Vida sin tabaco, ya que produce una vasoconstricción y esto reduce el aporte sanguíneo al disco.
– Descanso adecuado nocturno, a fin de rehidratar el disco.
– Evitar estar prolongadamente de pie.
Tratamiento
Incluso cuando la hernia discal duele, lo normal es que se pueda resolver con tratamientos no quirúrgicos, es decir, sin que llegue a ser necesario operar al paciente. Se estima que la cirugía tiene sentido en menos del 10% por ciento de las hernias discales que causan síntomas.
En Clínica Mohedo tratamos la sintomatología de una hernia discal tanto en fase aguda como crónica. Nuestro trabajo está enfocado principalmente con terapia manual tanto de partes blandas como de fijaciones articulares con el fin de producir un efecto analgésico y antiinflamatorio de la zona afectada, así como un trabajo postural, de tonificación y flexibilización de la musculatura implicada que el paciente realizará en casa.
Contamos con nuestras clases de Natación Terapéutica y Escuela de Espalda con un fin preventivo y de mantenimiento y así evitar recaídas y si las crisis agudas aparecen, que éstas sean de menor intensidad y más espaciadas en el tiempo. No dude en consultarnos su caso, le atenderemos gustosamente.
Aprovechamos estas fiestas para desearles una Feliz Navidad y que el año nuevo, llegue cargado de salud para todos.
