Con ligeros cambios de tiempo y circunstancia sobre las versiones anteriores, el cine vuelve a fijarse en la figura de King Kong (90-180-90, pero en metros) y vuelve a dar con una clave para dar en el clavo.
Sin contar las aventuras cinematográficas en las de King Kong se peleaba con otros bichos, como Godzilla, o tenía descendencia o apestaba a secuela, se puede decir que ha habido tres notables películas anteriores sobre el gran gorila, y que cada una de ellas puede reconocerse fácilmente por la actriz que se debatía.
En esta última mirada a King Kong, que se la ha dirigido Jordan Vogt-Roberts, sin una filmografía anterior que reseñar, hay algunos detalles de interés, y tal vez el primero de ellos sea que no se recordará esta versión, como las anteriores, por «la chica» que hace suspirar al gorila, a pesar de que Brie Larson, la actriz que interpreta a Ann Darrow, aquí fotógrafa de guerra, tiene tantos atractivos como otras actrices.
Un equipo de exploradores es reunido para aventurarse en el interior de una isla del Pacífico -tan bella como traicionera- que no aparece en los mapas, sin saber que están invadiendo los dominios de King Kong.
Películas todas en formato digital.
Precio de la entrada: 6,50 euros. Los sábados, domingos, vísperas y festivos.
Lunes, jueves y viernes (excepto películas Warner): 5,50 euros.
Día del espectador: 4 euros (excepto películas Warner).
Esta programación puede estar sujeta a cambios.