Como estudiaron y consiguieron los hombres que construyeron Los Dólmenes de Antequera, los primeros rayos de sol del solsticio de verano entran en el Dolmen de Menga, siendo seis mil años después, todo un misterio lleno de magia, sorpresa y admiración.
Un grupo de veinte personas lo han podido contemplar desde el viernes 19 hasta hoy martes 22 de junio, en una visita especial y guiada desde las 6,30 hasta las 8 de la mañana, contando con las explicaciones de los guías del recinto dolménico.
Cada año tiene más demanda poder asistir a la salida del sol, y más desde este año con la candidatura del Sitio de Los Dólmenes de Antequera a Patrimonio Mundial.
Camino de ser Patrimonio Mundial
La candidatura que se incluía en la Lista indicativa del Patrimonio el 27 de enero de 2012, tras los informes preceptivos de la institución internacional (ICOMOS, ICCROM y UICN), convertirá a Los Dólmenes de Antequera en el primer bien megalítico reconocido por la UNESCO en España y el primero en la Europa continental, y se sumará a los de Stonehenge y Avebury en Inglaterra, Newgrange en Irlanda, Las Orcadas en Escocia y los templos neolíticos de Malta, o a los Círculos de Piedra de Senegambia en África.
Sería en el siglo XIX cuando los dólmenes inundan en el panorama europeo gracias a los viajeros románticos, como Lady Tenison, la primera que, animada por el trabajo de Mitjana, escribió sobre ellos en lengua inglesa, aunque ya habían sido utilizados para señalar la muy antigua fundación de Antequera, como hizo Francisco de Cabrera, a principios del siglo XVII. Divulgaron por la cultura de siglos pasados las imágenes de Los Dólmenes personajes como Gustavo Doré, Juan Temboury y Le Corbusier o Manuel de Góngora y Martínez y los arqueólogos Mélida, Tubino y Rada, Luis Siret, Cayetano de Mergelina, Juan Cabré, M. Emile de Cartailhac, Hugo Obermaier, Pierre París, Giménez Reyna y Vera Leisner.
En 2004 la Consejería de Cultura de la Junta, a instancias de Bartolomé Ruiz, impulsa un nuevo proyecto de investigación a los especialistas de las Universidades de Sevilla, Málaga, Granada, Alcalá de Henares y Lisboa, la UNED, la Escuela Superior de Conservación de Bienes Culturales de Galicia o de las Universidades británicas de Southampton, Leicester y Cambridge.
