El mundo, la vida, la historia, tiene también finales felices. Es el caso de Alba L. Hervás, una joven estudiante de Periodismo que durante los últimos meses, ha estado en nuestra Redacción como una más del equipo, tras el acuerdo de prácticas con la Universidad de Málaga que nos está ayudando a llevar la carga extra del Centenario de nuestro periódico.
Lamentablemente, muchas veces solo se leen o difunden noticias de cuando la empresa va mal, las relaciones jefe-trabajador son malas y terminan en los tribunales. Pero como en la vida, muchas veces, la mayoría, más de las que creemos o admitimos, tienen finales felices, con el caso de Alba. ¿Qué hace una muchacha con 22 años desplazándose cada día desde Fuengirola a Antequera para aportar su trabajo a esta Redacción?
Me lo he preguntado en más de una ocasión, y más cuando por casualidad, estudiantes que son de la tierra, no han querido acogerse a lo mismo que ha hecho ella o sigue haciendo José desde tierras granadinas.El problema del Periodismo (para quien les escribe, virtud) es tener vocación y pasión por él. Quien crea que este trabajo tiene horario tipo funcionario, se equivocó de carrera. Cuando esperen ser Matías Prats o Mónica Carrillo, piensen que hay miles que lo intentan, pero muy pocos los que llegan. El mundo del Periodismo es apasionante, aunque como la sociedad de hoy, está muy cuestionado por diferentes razones.
Cada noche, al acostarme (y sé que Alba también), me sigo haciendo la misma pregunta: ¿Y que me paguen por hacer lo que quiero? Es así la pasión de escribir en un periódico local, como se lo propuso el fundador Francisco Javier Muñoz Pérez o lo mantuvieron José Muñoz Burgos y Ángel Guerrero. O como anónimamente lo hicieron Pablo, Mari Carmen, María… o lo siguen haciendo hoy: Lorena y Joaquín, Vadi, Pablo, Dani y José… 100 años de Pasión por el Periodismo.Éste es el último día de la primera etapa de Alba en su “Sol”. Ahora te toca terminar los estudios y completar tu formación.
Sé, sabemos, que conseguirás todo lo que te propongas, porque vales, entiendes, te lo propones, pero sobre todo, porque tienes vocación y eres buena persona. Espero conseguir el sueño de todo periodista-empresario, poder llamarte en un futuro para que formes parte de nuestra plantilla. Te esperamos pronto y ya sabes: “¡Ama a Dios y Santa Eufemia sobre todas las cosas… y a tu Antequera, casi tanto como al Periodismo!”. Tu familia de papel y tinta te espera…
