El periodista Antonio José Guerrero Clavijo culmina un año 2018 completo de pregones en Antequera, exaltando esta vez la Navidad, en acto promovido por la Hermandad de Belenistas «El Nacimiento», a mediodía de este domingo 16 de diciembre.
La secretaria de la cofradía, Coqui Bracho, presentó y dirigió el acto, en el que tras dar la bienvenida, cedió la palabra a la pregonera de 2017, Elena Melero, quien presentó a su sucesor como un entusiasta de Antequera, sus cofradías y sus pregones, marcados por su Amor, la Fe y la Esperanza.
Empezó el Pregón, obviamente con su ya característico: «Antequera, Antequera, Antequera…» y donde se preguntó qué es la Navidad: una «forma de vivir en familia el Nacimiento del Niño Dios. La Navidad es Fe, es Amor, es Esperanza».
Tras su introducción, desarrolló una pequeña historia de ficción con dos personajes, Carmen y Pablo, que en el siglo XXII estudian sobre unos terrenos donde tuvo vida Antequera, una ciudad que perdió los valores de la Navidad.
Ahí compartieron cada uno unos libros que habían heredados de sus antepasados, “Amar a Dios sobre todas las cosas y, a mi Antequera, casi tanto como a Dios” y “Dos estrellas tiene el Cielo que siempre me acompañarán en Nochevieja cantando villancicos”.
En ellos recorrieron cómo desde niños fueron creciendo en familia, con el amor y la unión en Navidad, desde que montaban el Nacimiento en casa hasta que celebraban Nochebuena, el Día de Navidad, Nochevieja y los Reyes Magos.
Fue cuando Guerrero Clavijo empezó a formar un Nacimiento en la mesa plenaria, con las figuras de su padre: seleccionando el ángel de la Anunciación, el Rey Melchor, San José, la Virgen María y el Niño Jesús.
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Su petición de una Navidad en familia
Durante su pregón, fue entonando villancicos para que el público le acompañara en su narración de la Navidad. De los recuerdos de niño pasó a los de joven y ahora a los de padre, pidiendo la colaboración de todos para que su hija, ahijados y sobrinos pudieran crecer en el ambiente que él pudo.
Para terminar, intentó por unos segundo coger la magia de un rey mago, para lo que intentó ver en el corazón de los presentes lo que habían pedido, aunque les preguntó su habían escrito la carta.
«Sigo viajando por estos bancos del Salón de Plenos y veo el deseo que las familias se hubieran querido para siempre y nunca se hubiesen tenido que separar y vivir lo que está por venir.¿Pocos regalos materiales, verdad? Pues, aprovechen los que tienen hoy, en la cena de Nochebuena, Navidad y Nochevieja, que no saben hasta cuándo podrán tener todo lo que disfrutan».
Y ya para finalizar, deseo «que llegue el día de Reyes Magos, y sientas lo que todo niño debe sentir: el amor de su familia, la ilusión por ese regalo que forma de juguete, pero que más regalo recibe el que lo da que el lo coge, porque no sé si se emociona más el que ayuda al Rey Mago que el niño que recibe su premio. Y ver con nuestros hijos, esos enormes Belenes, donde cada figura acoge el alma de los que ya no vemos, pero están ahí, cantando villancicos, pidiendo que nos unamos a la fiesta en familia.Pero para ello hay que vivir, sentir y hacer posible la Navidad en casa, en la calle, en nuestra ciudad, en Antequera».
Fue escogiendo figuras y términos de estas fiestas en los que destacó el Amor: «Hace falta amor en las familias todo el año y más en Navidad. Que donde haya dos y más, siempre esté presente el amor de Jesús». Y la Navidad. «Sin darnos cuenta, en cualquier momento, está naciendo un Niño, que como el Niño Dios, será el rey de nuestras vidas».
Y para finalizar exaltó: «Yo no quiero verte, Antequera, bajo el olvido de la esencia de la Navidad. Yo quiero, Antequera, seguir viendo salir el Sol… y que sea lo que el Niño Dios quiera… ¡Feliz Navidad, familia y próspero año 2019 desde… ¡Antequera, Antequera, Antequera, por siempre Antequera y nada más… pero nada menos!».