Carmen Díaz emociona al recordar a los que se fueron y abre la puerta a la Semana Santa de los niños, en la presentación del Cartel de la Semana Santa de Antequera de 2021, obra de Fonsi Muñoz que deja ya escrita una página para la historia cofrade que será recordado como el cartel del año de la pandemia: un collage como homenaje a los recuerdos de una ciudad.
El sábado 20 de marzo de 2021, el mismo día que se cumplía un año del primer fallecimiento oficial por el virus en Antequera, la Agrupación de Cofradías organizó la Presentación del Cartel de la Semana Santa de 2021, obra de Fonsi Muñoz, desvelado por Carmen Díaz.
No era Jueves Santo, era sábado 20 de marzo de 2021. Tímidamente, cofrades iban llegando a la Plaza de San Pedro. Las puertas aguardaban cerradas, mientras que en el interior, la Agrupación y los protagonistas del acto ultimaban los últimos detalles. A las 11,30 horas se abrieron con control de aforo, acceso para quienes presentaban invitación: autoridades, hermanos mayores, un directivo por cada cofradía agrupada, familiares del autor y la presentadora.
Se llenó el aforo permitido. El Sol de Antequera transmitió en directo el acto para las personas que no pudieron desplazarse. A ambos lados del Altar Mayor, la Virgen del Consuelo, vestida de negro, y el Cristo de la Misericordia, presidían el montaje extraordinario, fusionándose con el Cristo de las Penas que preside todo el año bajo el baldaquino original de la antigua Colegiata de Santa María.
Murmullo cofrade como en los buenos tiempos, pero con mascarilla, distancias, gel hidroalcólico y ganas de comenzar. A las 12,03 horas, el cronista de la Agrupación de Cofradías, Pablo Javier Guerrero Clavijo abrió el acto.
“Y va y dice el Pregonero… “Por tu Amor, Antequera, preparamos todo como siempre, pero esta vez, más. Y porque no queremos que la imagen que recorra tus calles sea solo imagen de Dolor, en llegando el último día iremos con Cristo Jesús Resucitado por tus calles, para llenar ellas del mensaje de paz y bien; de fe, esperanza y caridad, del Cristo que vence a la Muerte. Por tu amor, Antequera, por el que te tienen todas tus cofradías y, por ellas, su Agrupación”.
Saludó a las autoridades y cofrades presentes (en primera fila, el arcipreste Antonio Fernández, el alcalde Manuel Barón, la presidenta de la Agrupación Trinidad Calvo, el autor y la presentadora del Cartel), y además por parte del Ayuntamiento, la teniente de alcalde Elena Melero y los concejales: Francisco Calderón, Gema González y Pilar Ruiz.
Así como hermanos mayores y representantes de las cofradías de Pasión y Gloria, fuerzas de Seguridad del Estado, y el pregonero de la Semana Santa que está por venir: Manuel García de la Vega.
Tras repasar lo vivido este año, introdujo la parte musical a cargo de los hermanos Pablo y Alberto Garrido Madrona. Pablo Garrido Madrona es clarinetista tras estudiar en el Conservatorio Superior de Música Victoria Eugenia de Granada y en Weimar (Alemania). Actualmente es profesor en el Conservatorio Superior de Música ‘Rafael Orozco’ en Córdoba. Y Alberto, pianista. Se formó en el Conservatorio Superior de Música de Salamanca y en Karlsruhe (Alemania). Actualmente es profesor de lenguaje musical en la Escuela Municipal de Música de Antequera (EMMA) y oposita a profesor de piano. Interpretaron: ‘Sancta Maria’ de Pietro Mascagni, ‘Vidit suum dulcem natum’ de Pergolesi, ‘Preghiera’ de Tosti, ‘Pietá Signora’ de Stradella y terminaron con el ‘Ave María’ de Schubert.
Luego, el Cronista destacó que llegaba el momento de ver la obra: “Que sí Fonsi, que eres un artista de excepción por más que te empeñes en no reconocerlo; prácticamente autodidacta, humilde, buena gente y entregado en cuerpo y alma a todo lo que tenga que ver con su ciudad y sus cofradías desde su barrio de San Juan pasando por la iglesia de San Sebastián”.
Pero también “otra evidente protagonista como será Carmen Díaz, la encargada de traducirnos lo que representa ese cartel, de traernos su significado, de hablarnos de su autor…”.
María del Carmen Díaz González (Antequera, 21 de junio de 1974) comenzó como penitente en la Cofradía del Consuelo con 15 años, para iniciar su actividad directiva en la Junta Joven, para ir siguiendo por varios cargos hasta ser primera teniente de hermana mayor, siendo hoy consejera. Es también cofrade del Rescate, del Rocío de Antequera y de la Hermandad de la Virgen de la Cabeza de Málaga. Presentó el Cartel Anunciador del Jueves Santo del año 2013 de la Cofradía del Consuelo y pregonó el Martes Santo del Rescate en 2016. Estudió en el Colegio de la Victoria y se formó en la Escuela de Agentes de Pastoral. Casada con Jorge Varo con quien tiene una hija: Victoria Linh.
Carmen Díaz puso voz y sentimiento al año padecido y vivido por los cofrades
Y empezó la Presentación en sí. Subió al ambón y empezó su intervención. “Y no se escucharon los últimos sones de las cornetas, ni los vivas a nuestros Cristos y nuestras Vírgenes, ni tuvimos ese olor a incienso y cera, ni se escucharon las saetas, ni disfrutamos de nuestra Pasión, Muerte y Resurrección, en ese museo que ponemos en la calle, nos lo impidió este enemigo común, que nos dejó sin palabras, pero no nos robó el sentimiento, ni la Fe, ni la oración, ni el Encuentro con el Señor, desde nuestras casas, en soledad con nosotros mismos, pero a la vez con todos nuestros hermanos, con los que cada año lo compartíamos personalmente, y a los que podíamos abrazar, sentir, llorar, reír, ya no, todo fue distinto, desde nuestro interior, desde nuestro encuentro íntimo con el Señor, aunque hubo un rinconcito cofrade para celebrar el día o los días de nuestros Titulares, poniendo altares, recordando los vídeos de otros años, o poniendo velas y flores ante nuestros templos, y así fue… Doloroso y triste, como es verdaderamente la Pasión de Cristo, pero también supimos resucitar, con esa Vigilia Pascual en la que participamos muchos cofrades, para así celebrar la vida, la luz, que nos hacía falta más que nunca, la fe, la esperanza, y el amor a los demás”.
Así enmudeció al templo nada más comenzar. Luego saludó a las autoridades y agradeció a la Agrupación haberla escogido para la tarea de presentar el Cartel. “Pero hoy lo que nos convoca aquí es hablar del Cartel que nos abrirá las puertas de esta especial Semana Santa 2021, que espero nos sirva para reflexionar, vivir y preparar nuestro corazón. Como he dicho en mi comienzo, nada será igual, pero tampoco espero que sea parecido a la pasada. Creo que podremos vivirla aún más intensamente, los cofrades somos únicos para realzar y sacarle todo el jugo a nuestros días grandes y así lo viviremos”.
Subrayó la importancia de la Semana Santa que se vive ya haya pandemia o no se puedan organizar procesiones. “La Vigilia Pascual, uno de los tres momentos que junto con la Misa de Nochebuena y Pentecostés, deben ser lo más importante para la vida de un cristiano cofrade comprometido”.
Entró a lo que debe: presentar el Cartel: “Este año el encargado de realizar esta maravillosa tarea es Alfonso Muñoz Díaz, Fonsi como todos lo conocemos. Fonsi es un buen cristiano cofrade, nace en Antequera el 6 de marzo de 1990, sus orígenes familiares vienen de tres vertientes: del barrio de San Juan, del barrio de San Pedro y de la sierra Sur del Torcal”.
La devoción, la fe y el cariño a nuestra Semana Santa, “le viene de sus mayores, concretamente de su abuela, devoción por distintas imágenes como son la Virgen del Socorro, el Señor de la Salud y de las Aguas, la Virgen de Jeva, el Cristo de las Penas, la Virgen del Consuelo y el Cristo del Mayor Dolor. Con cinco años, acompañaba a su abuela a alumbrar en su promesa a la Socorrilla y así lo ha hecho durante 25 años”.
Sus recuerdos cofrades por parte de su abuela son recuerdos “de una época difícil, de hambre y miseria, pero aún así como él me cuenta, recuerda que su abuela todos los años se acercaba a San Pedro a disfrutar el desfile procesional del Consuelo y como le llenaba de entusiasmo el ver moverse el pelo de María Magdalena y de San Juan, provocado por el movimiento del trono. Fonsi ha realizado varios trabajos para nuestras Cofradías como son el Cartel del Domingo de Ramos, Cartel Procesión de Santa Eufemia, Cartel Procesión de la Virgen de los Remedios y diversos trabajos para su Cofradía del Mayor Dolor, todos ellos realizados altruistamente, de igual forma que este cartel que presentaremos a continuación”.
En palabras suyas, “no se considera un artista, sino un mero aficionado, un amante del arte, la historia y de su Antequera. Me ha confesado que aceptó realizar esta obra para honrar a su familia y en especial a sus mayores. Su vida cofrade, actualmente se desarrolla, en la Cofradía del Mayor Dolor, como vestidor de la Santísima Virgen y en la Esclavitud de los Remedios, donde se encarga de los adornos florales, ambas de forma altruista y como el reafirma, en un segundo plano. Su Fe siempre ha girado en su Señor de San Juan, el de su barrio, como el mismo me confiesa, es y ha sido su faro, su luz y su guía”.
13 horas y 9 minutos. Fue cuando pidió al propio autor, al alcalde Manuel Barón, a la presidenta de la Agrupación Trinidad Calvo, al representante de Unicaja Banco Pablo Cordón (patrocinadora de la impresión del Cartel), y al arcipreste Antonio Fernández, a que descubrieran, primero la obra original y luego la impresa.
Dos telas negras cubrían cada una y momentos de expectación. Nada más descubrirse, admiración de los que destaparon la obra, y aplausos en el templo y en las redes sociales que seguían el acto en directo. Original, atrevido y rompedor. Carmen lo describió como “una maravillosa obra, que tengo que decir, me dejó fascinada en un primer boceto y enamorada cuando lo vi, sé que has puesto alma, salud y corazón en ella, amigo Fonsi enhorabuena, espero explicar y desglosar todo como se merece tu gran trabajo”.
El mensaje de este cartel es “todos unidos por Cristo en la Fe”. El autor ha utilizado distintas técnicas para cada de él. “En el centro aparece la imagen del Cristo de la Salud y de las Aguas, imagen del Patrón de nuestra Ciudad y muy vinculado al autor. Para el rostro ha utilizado lápiz y sanguina de estilo clásico. El paño de pureza lo ha realizado con una sábana de una residencia de ancianos, en referencia a todos los mayores que han sufrido las consecuencias de esta pandemia y haciendo a la vez un homenaje a la industria textil de nuestra Semana Santa, como son las dalmáticas, monaguillos, hermanacos y mantillas”.
Mantillas que llevan esas grandes promesas que solo ellas y la imagen a la que alumbran saben. “En un momento íntimo que durante horas acompañan a Cristo al Calvario. Mujeres que piden o dan gracias por sus hijos, sus familias o cualquier otro motivo. Monaguillos, dalmáticas, campanilleros, que nunca dejan solos a nuestros Titulares en la calle. Siempre van arropándolos con toda su entrega y su Fe. Además, en el nudo del paño de pureza están colocados tres alfileres que representan los tres clavos de Cristo haciendo homenaje también a vestidores y camareras. Camareras que dedican tiempo, a veces sacrificando su descanso y a sus familias, para coser, limpiar, planchar, bordar, poner flores, trabajar en ferias, verbenas y todo lo que haga falta para engrandecer a la Madre y su Hijo. Vestidores que dan lo mejor de ellos para embellecer si cabe más a nuestros Sagrados Titulares, con cada alfiler puesto con alma, devoción, corazón y Fe”.
Para el torso, los brazos y piernas del Cristo, “ha utilizado la técnica de la obra del artista alemán Hannah Hoch, con distintas imágenes antiguas y grabados de nuestros Titulares; imágenes de bordados antequeranos; documentos fundacionales que aunque aparezcan deteriorados, representan el paso del tiempo y la vida de nuestras Cofradías; así como imágenes de campanilleros, hermanacos, tarjeteros con cornucopias y algunas imágenes que antiguamente procesionaban con palio. El autor ha querido representar con esta técnica el sentimiento que todos llevamos marcado y que define nuestra vida como cofrades”.
El pecho del Señor lleva un exvoto, “llama de la Fe de cada uno, en el que aparece una corona de espinas, homenaje a los orfebres y plateros, que con su trabajo contribuyen a embellecer el patrimonio de nuestra Semana Santa, realizado en estaño modelado recortado y pintado con óleo. Plateros y orfebres que hacen verdaderas obras de arte y conservan gran parte del Patrimonio con restauraciones muy importantes, para que nuestra historia cofrade perdure en el tiempo. Joyas hechas promesas, con muchas oraciones y milagros puestas en ellas. Ciriales, incensarios, navetas, campanas y muchos más elementos tan importantes en nuestros cultos y Estaciones de Penitencia”.
Siguiendo la figura del Cristo, “nos paramos en sus potencias, realizadas en arcilla blanca, además de collage dorado en láminas de oro metálico y aplicación de esmalte, inspiradas en el Cristo de las Suertes, ubicado en la iglesia de los Remedios, el cual se procesionó durante algunos años y es la imagen cristífera más antigua de Antequera.Estas potencias están terminadas en láminas de oro, representando así a los doradores y tallistas y además cada una de ellas homenajea a un sector importante en nuestra Semana Grande, como son la música cofrade con distintas partituras; el arte floral con dibujos florales; y los medios de comunicación” con distintas portadas antiguas de El Sol de Antequera.
“Doradores y tallistas que dan forma con su trabajo y esfuerzo al resultado de lo que rodea y exalta a nuestras imágenes. La música tan importante para llevarnos a la oración, emoción y recogimiento, a veces sonrisas y a veces lágrimas, por lo que te transporta en los recuerdos de tu memoria. No se concibe una Semana Santa sin sus marchas, sin su sintonía única y particular. El arte floral, un trabajo con mucha sensibilidad, con mucha paciencia, buen gusto y buen hacer, para realzarlos con su colorido y olor. Los medios de comunicación, que llevan al que no puede nuestra Semana Mayor, gran obra de Misericordia y gran labor social para el que es mayor, está solo o enfermo”.
La silueta del Señor y la Cruz están realizadas en madera recortada, a diferentes alturas para crear visualmente el efecto de profundidad. La ráfaga que bordea la Cruz ha sido realizada con papel reciclado y a continuación dorado con láminas de oro metálico, representando la Luz de la Resurrección y haciendo referencia al Cristo al que el Papa Francisco rezó para frenar la pandemia. En la parte inferior, debajo de los brazos del Señor, aparecen las diez imágenes marianas de nuestra Semana Santa, “sí, he dicho diez porque el autor ha querido que esté presente también la Virgen de los Afligidos, que procesiona junto al Cristo de la Misericordia y a la cual le tiene especial devoción, están hechas sobre cartón en pintura en acrílico estilo pop art, unidas a la base del cartel por 40 clavos, cuatro en cada uno de Ellas, simbolizando así el tiempo de Cuaresma”.
Las letras de Semana Santa están hechas como un sello estampado, que se ponían en las cajas de madera dónde se guardaban las obras de arte durante la Guerra, “evocando así a una época donde como ahora, se suspendieron las procesiones, expresando así la conservación de nuestro Patrimonio Museo. Las letras rojas de Antequera 2021 están realizadas en cera roja fundida, perteneciente a un sobrante de cera de un penitente tras cumplir su promesa, homenajeando así a todas las promesas que acompañan a nuestros Sagrados Titulares”.
Todas estas piezas van montadas sobre una base, usando gasas y vendas encoladas y pintadas, en referencia a todos los sanitarios que han estado en primer plano luchando por todos nosotros. “Y por último y no menos importante, el cuadro está rodeado de ramas de zarza del río de la Villa, de su barrio de San Juan, símbolo del sufrimiento de la Pasión de nuestro Señor. Sin duda, un cartel lleno de emociones, recuerdos, sentimientos y lo más importante, de mucha Fe, Esperanza y Caridad”.
Exaltación a la Madre según las pasiones en Antequera y sueño final con niños
Momento que llegaba a su fin, pero antes quiso rendir un homenaje a la Virgen, nombrando a todas las advocaciones mariana, llamándolas Madre de la Esperanza, “de los que han nacido y están creciendo en el vientre de sus madres”. Vera Cruz “de tantos y tantos para acompañarlos y no abandonarlos en sus últimos momentos de vida”. De la Piedad y el Perdón “a los que pudiendo ayudar no lo hicieron y miraron a otro lado, Piedad Madre, Piedad y Perdón, por el egoísmo de mirar sólo a nuestro ombligo”.
Mayor Dolor “de los que no pudieron estar en el último momento de un ser querido, tú sabes mejor que nadie qué es sentirse sola ante el gran dolor de ver morir a tu Hijo, traspasando una espada tu corazón”.
Consuelo “para las familias, padres, hijos y nietos, todos los que han perdido algo o alguien, para los que no tienen trabajo, para los que luchan cada día por un mundo mejor, cúbrelos con tu manto colorao de amor, dales el calor de Madre, Madre amorosa”. De los Afligidos, “estandarte de la Fe cuando ésta se tambalea, a veces hermana y Madre nuestra”. De los Dolores “ofrecida por tantos que seguimos rezando y pidiendo no perder nuestra Fe, ante tanto sufrimiento, ante tanta falta de entrega, tú que sufriste los siete dolores”.
De La Paz “de alma y cuerpo, ¡siémbrala en nuestros corazones con tu mayor anhelo!”. Del Socorro “porque tenemos que seguir y se hace difícil cuando la situación de la vida ahoga y no te deja respirar, unos por enfermedad, otros por falta de un hogar, de una familia, sé nuestro Socorro, nuestro refugio”. De la Soledad “de tantos ancianos que estuvieron y están solos, que tu mirada dulce los traspase y encuentren tranquilidad y compañía”. Y ¡Madre de la Resurrección!: “Tú junto a tu Hijo seréis Luz, Vida, Resplandor, Aliento y Aire Fresco, eso será lo más importante este año, resucitar para seguir luchando y cambiar nuestra vida. Que la Paz y la Esperanza nos dejen superar los Dolores, la Soledad, el Mayor Dolor y la Aflicción, mediante el Consuelo y el Socorro, siendo la Piedad y el Perdón nuestras únicas acciones para soportar como María a la Vera de la Cruz esperando la Resurrección, y así la Luz ilumine nuestros corazones cansados, dolidos y pobres”.
Antes de terminar “me gustaría contaros una historia con la que cada uno de nosotros soñamos, y con la confianza puesta en Dios, si el quiere, pronto se hará realidad. En una ciudad Patrimonio de la Humanidad, no sólo por sus monumentos, sino también por sus gentes, (momento en el que salieron unos niños vestidos como suelen hacer en las procesiones de Semana Santa ante los aplausos y emoción del público) había unos niños a los que una maldita epidemia les impidió poder jugar juntos, pero también hacer una de las cosas que más les gustaban, acompañar a sus Cristos y Vírgenes en su particular, grandiosa y maravillosa Semana Santa y con la ilusión y la inocencia de ellos, a esta presentadora que os habla, se le ocurrió que vivieran por unos instantes esta experiencia y así lo he hecho. ¡Porque se lo merecen más que nadie porque son lo mejor y más importante que tenemos junto a nuestros mayores y porque es mi deber como cristiana y cofrade hacerlo así de la única manera que por ahora podemos y con esta maravillosa estampa acaba mi presentación: porque sí hay Semana Santa!”.
El público se puso en pie y no paró de aplaudir. Por último, el autor del Cartel intervino dando las gracias “a la Agrupación de Cofradías de nuestra ciudad, por brindarme el honor de designarme autor de este cartel. Y las gracias cómo no, a ti Carmen, gracias por tanto… Gracias por tu entrega absoluta desde el primer momento, por tu interés y cariño, por tu continuo apoyo… Por haber dedicado algo tan valioso como el tiempo, en un gesto de amor hacia nuestra Semana Santa y hacia mi propia persona el caprichoso destino nos cruzó, y has llegado para quedarte. Y es que Dios es eso, Dios es amor y es respeto. Dios no entiende de etiquetas, de favoritismos o de odios; eso es cosa nuestra”.
Comenzó el capítulo de agradecimientos, en el que la Presidenta de la Agrupación entregó una réplica de una potencia del Señor Resucitado a Fonsi Muñoz; la vicepresidenta de la Agrupación, Visi Bracho, entregó una reproducción de un Cartel a la presentadora Carmen. Y la secretaria Puri Muñoz, hizo lo mismo con Pablo Cordón.
Cerró el acto la Presidenta Trinidad Calvo Gómez, quien agradeció los gestos de Fonsi y Carmen, a todos los hermanos mayores, a su Junta Permanente, a toda la ciudad por saber llevar este complicado año y por tener la esperanza que pronto podrán de nuevo salir en procesión, pero que como todos los años, toca celebrar el Triduo Pascual, la base de todo cristiano, de todo cofrade y ojalá pronto se recupere la normalidad perdida.
Pidió un gran aplauso para Manuel García de la Vega, quien por segundo año no ha podido pregonar la Semana Santa, el día que lo haga significará que todo vuelve a como se desea. Al terminar, felicitaciones como se pudieron a ambos personajes del día, incluida a la propia presidenta de la Agrupación. Era el primer gran acto, después de un año en casa, sin poder reunirse, aunque sea con las medidas de seguridad que siguen aconsejando para afrontar la pandemia.
Tras una amplia espera por no parar de recibir felicitaciones, el autor nos decía que su intención era representar “la Antequera más pura, saber valorar de dónde venimos y conservar lo que nos diferencia, la importancia del amor de verdad, y como lo moderno es capaz de subsistir con lo clásico sin distorsionarlo y sin necesidad de perder la verdadera esencia“. Y durante el acto: “He sentido cómo mi pasado me abrazaba, me he visto entrar en San Juan de niño, he sentido a todos mis seres queridos conmigo“.