Como mucha gente se temía, se notó la crisis y, en lo relativo a la interesante “para el aficionado” corrida montada por Paco Dorado. Pero con el debido respeto, la gente se resistió a acudir, porque recordemos que el cartel de la corrida era ideal para aficionados que saben de la buena carrera del francés Juan Bautista y los triunfos y prometedor futuro del torero de Camas Oliva Soto, que para el público… que es quien, en definitiva llena las plazas. No nos engañemos. Y a esa mayoría, le hubiera gustado más… si no un corridón de los de Agosto, sí que al menos un cartel hecho con toreros que hoy no toreaban, entiéndase “El Cordobés”, Jesulín y, eso sí, completándolo y por si atraía a alguien de Sevilla, Oliva Soto. Además, lo del “Homenaje a Francia” por su defensa de la fiesta nacional en Cataluña, quedó en la contratación de un torero francés, y una corrida de toros francesa, primera que se lidia en el coso antequerano desde su fundación en 1848. Total que a pesar de lo que todos hubiéramos querido, la cosa quedó en un cuarto de plaza de entrada.
Según nos dice nuestro colaborador FRANCIS, se lidiaron seis toros de la ganadería francesa de Pîedras Rojas, desiguales, por los diestros Juan Bautista, silencio y una oreja; Oliva Soto, una oreja y una oreja, con salida a hombros, y Miguel Ángel Delgado, silencio y ovación. Un cuarto de entrada,
El francés JUAN BAUTISTA, de tabaco y oro, demostró sus deseos y buenas hechuras; estuvo voluntarioso con el capote en su primero, un toro noblón, pero sin fuerzas, que no permitió más que algunos lances vistosos del francés. Mató de gran estocada y fue ovacionado. En su segundo, BAUTISTA, se encuentra con otro toro noble y templado, pero sin demasiadas fuerzas, Aplaudido con el capote, en la muleta torea por derechazos y naturales muy templados y vistosos, luciéndose en circulares invertidos. Mata de buena estocada y corta una oreja.
El cameño OLIVA SOTO, de azul purísima y oro, vistoso con el capote, que mueve con arte y temple. Artista y pinturero con la muleta, logra sacar al buen toro tandas con ambas manos que se aplauden con ganas por su derroche de elegancia y pinturería. Mata de pinchazo y estocada recibiendo, y es premiado con una oreja. Se luce en su segundo, otro toro bueno, noble y con movilidad que le permite el toreo que le gusta hacer al sevillano. Verónicas muy artistas con erl capote para hacer una faena «agitanada», artista, lenta, majestuoso, adornándose y gustándose con la muleta, haciéndose jalear. Mata a la segunda y corta otra oreja. Hay torero de gusto y arte, con esa sensibilidad especial que le dan los toreros gitanos. Salió a hombros de la plaza, con una ramita de romero en la mano… por si le faltaba algún detalle de buen gusto.
MIGUEL ÁNGEL DELGADO, de verde manzano y oro, recibe a su primero por verónicas pero el toro, peligroso e incierto, flojo y con poca fuerza, no colabora con el espada, que incluso recibe una voltereta, de la que se repone en seguida, para seguirlo intentando, pero sin suerte, Bajonazo y silencio. En su segundo, valiente y con ganas pero, sin toro que le ayude, logra una buena tanda de derechazos y mata de pinchazo y estocada hasta los gavilanes, pero que precisa del descabello. Aplausos.