La concejal delegada del Área de Patrimonio Histórico del Ayuntamiento de Antequera, Eugenia Acedo, informa de la conclusión de los trabajos de restauración en dos esculturas de relevancia alusivas a la Virgen María pertenecientes a la capilla del Colegio La Salle y la iglesia de San Miguel respectivamente: la Virgen de la Antigua y una Inmaculada, según comunicado del Gabinete de Prensa del Ayuntamiento de Antequera.
«Ambos trabajos de restauración han sido llevados a cabo por el Taller Municipal de Restauración con la especialista Marisa Olmedo al frente.
Virgen de la Antigua de La Salle: Informe de actuación
Esta escultura está totalmente repolicromada y es dificil imaginar su aspecto primitivo porque apenas subyacen restos originales. Al menos se aprecian dos intervenciones importantes. Hay una antigua, cuyo resultado es el que se puede contemplar en la actualidad y que seguramente fue consecuencia del grave deterioro que sufría la imagen tras un fuerte ataque de xilófagos. Y también encontramos una restauración más reciente, que junto a la descrita anteriormente, impide realizar una lectura acertada de la obra tal como fue creada.
Tras el estudio previo, la intervención a la que se le ha sometido en el Taller Municipal ha sido la de sustitución de cuatro dedos de la mano derecha, de muy mala facturación y que, posiblemente, fueron implantados en la última intervención a la que anteriormente hemos hecho referencia. Su presencia en el taller ha permitido realizar una amplia investigación sobre la misma.
Virgen Inmaculada de San Miguel: Informe de actuación
Esta pequeña talla sobre peana, está repolicromada en la totalidad, unas zonas ofrecen más calidad que otras porque seguramente son producto de diferentes intervenciones. En el momento de su llegada al taller municipal carecía de manos, en sustitución de estas tenía dos trozos de madera con una talla muy burda. Los ojos de vidrio y los huecos donde se alojan habían sido alterados en alguna antigua restauración, la peana era de madera sin policromar, de realización posterior a la escultura y se hallaba en mal estado de conservación.
La restauración ha consistido en la limpieza de suciedad, viejos barnices y restos de cera de la policromía actual. Se han consolidado zonas con desprendimiento de la capa pictórica. Se han tallado nuevas manos, y la peana se consolidó, estucó y coloreó. Y por último se ha intervenido sobre los ojos, intentando corregir la falta de párpados que le confería un aspecto poco natural a la expresión del rostro», termina el comunicado del Gabinete de Prensa del Ayuntamiento de Antequera.