En la zona arqueológica, la propuesta es «regenerar el espacio patrimonial existente», según detalla la propuesta, implementándolo además como un área interpretativa-educativa. Dentro de los objetivos de la propuesta de jardinería, se pretende consolidar los trazados existentes en el Patio de los Naranjos; en el Patio de Los Cerezos, «se cambiará textura y color, pasando a una tonalidad más tenue y de menor reflejo»; además, en el Patio de los Cedros se buscará recuperar la masa arbórea que existía. Todo ello, de la mano de la empresa Jardines de Icaria, encargada de estudiar cada una de las zonas de la Alcazaba.
De la misma forma se instalará una tarima de madera con la intención de crear un mirador en el que se pueda contemplar la Peña de los Enamorados y la antigua Real Colegiata de Santa María; otra tarima potenciará el espacio multiuso de la Casa del Alcaide; igualmente, un pavimento de madera organizará el paso interior al yacimiento arqueológico, permitiendo la adecuada visualización.
El alcalde de Antequera Manuel Barón ha recalcado que son conscientes «de que esta zona patrimonial y arquitectónica de nuestra ciudad tiene un déficit y era una cuestión fundamental que supone la mejora de los jardines de la Alcazaba. Es una nueva apuesta por mejorar un recurso ya existente»; por su parte, José Ramón Carmona destaca la recuperación «del jardín mozárabe del Castillo de Papabellotas», en un proyecto en el que «se realizarán diferentes actuaciones en cuanto a jardinería e interpretación de los yacimientos se refiere». Más información, edición impresa sábado 3 de septiembre de 2016 (pinche aquí y conozca dónde puede adquirir el ejemplar) o suscríbase y recíbalo en casa o en su ordenador, antes que nadie (suscripción).
