La empresa Aratispi desarrolla desde esta semana catas en el Cementerio de Antequera para localizar la fosa común de restos de fusilados de la Guerra Civil que se prevé exista en la zona donde está el monumento a los perseguidos.
Se trata de un proyecto de investigación promovido por la FEMP (Federación Española de Municipios y Provincias) para la localización de fosas comunes relacionadas con la Guerra Civil Española dentro de la Ley de Memoria Histórica, con la participación del Ayuntamiento de la ciudad.
El año pasado se realizaron estudios de geolocalización con radar, delimitándose esta zona sin tumbas exteriores, pasillos y la zona exterior como posible lugares donde se perciben restos bajo tierra.
De momento se han encontrado restos humanos de hospitales que los depositaban en esa zona, pero se prevé encontrarla de aquí a dos meses.
En la memoria inicial se expone que “no se concretaba la ubicación exacta, por lo que ha sido necesario un estudio previo basado en investigación documental y recogida de testimonios orales; de igual forma, se ha procedido a georreferenciar las inhumaciones localizadas documentalmente, así como los lugares indicados por familiares”.
Además, Antequera fue un sitio estratégico desde 1936 a 1939, por lo que aquí se debieron fusilar y enterrar a muchas víctimas de la ciudad, la comarca, incluso de la provincia. Se estima que pueden estar enterrados cerca de un millar de personas sin conocerse oficialmente el lugar y quienes están en las fosas.