Nos atrevemos a describir alguna de las pinceladas que esperábamos vivir del 5 al 12 de abril en Antequera, pero que la pandemia lo deja para nuestros sueños. Para empezar, el Teatro Torcal tendría que haber acogido el Pregón de la Semana Santa de Antequera de 2020, cuya misión fue encargada para Manuel García de la Vega, un hombre bueno, que puso su corazón y experiencia de Dios al servicio de su palabra. Un año tiene para darle algún giro, porque lo vivido este año, será para exaltar. Desde 1974, Antequera siempre había tenido, pronunciado entonces por Juan Rodríguez Rosado en Santa María. Antes, desde 1950 había tenido algunas interrupciones, pero desde 1974, hace 46 años que siempre se habían desarrollado.
El Pregón hubiera sido una catequesis, en la que conociendo algo ya al pregonero, hubiera empezado de una manera sublime, magistral, poniendo a cada uno su propio corazón en el puño para ofrecerlo a cada titular cofrade. Habría recorrido cada imagen, cada momento, cada devoción, con alguna oración o historia particular, jugando con las luces y la música como tiene su librillo.
Un Pregón en el que hubiera dejado claro que la Semana Santa son más que procesiones, como lo será este año. Y con una exaltación de la Eucaristía como meta de cada cristiano y obviamente a los cofrades. Puede que como ya hiciera en otras intervenciones, aludiera seguro a sus hijos, a su vivencia en el túnel de la UCI y a su experiencia de Dios. Y como él nos dice con su peculiar forma de ver la vida: “Dios ha querido que sea pregonero en los 400 años del Socorro y en el 2021, el 300 del Rescate. ¡Qué cosas tiene Dios. Se le nota que me quiere a reventar!”. Lo dice todo y, aunque él sabe lo que es valorar ya la vida, pese a su juventud, como pregonero habrá pasado días malos, pero de inmediato habrá asumido que lo importante es la vida y superar esta situación.
La Presentación del Libro y el Vía Crucis del Nazareno abrirían la Semana de Pasión
Este Periódico habría preparado la presentación de este ejemplar (pero con más páginas y contenidos que se publicarán en 2021) en la iglesia conventual de La Encarnación; con café y pestiños en GastroBar Casa Lucía de Cuesta de Zapateros. Luego, al terminar los triduos, el Nazareno de la Sangre, como cada cinco años desde el año 2000, habría subido al Cerro de la Cruz en Vía Crucis.
Ya el sábado, entronización del Señor del Rescate, mientras que todas las cofradías tendrían preparados sus tronos para ir colocando las flores los días previos de su salida. El Domingo de Ramos amanecería con sol y ramos de olivo para festejar con palmas el inicio de la Semana Santa en templos, conventos y parroquias. Y por la tarde, la primera de las procesiones, la de la Cofradía de San Agustín, la de la Pollinica. Donde Antonio González se hubiera estrenado como vestidor. Cartela delantera tallada en madera para el Señor a su Entrada con nuevo mantolín de damasco. En el Orando, otro mantolín y arreglo de las túnicas de los hermanacos. Y en la Virgen de la Consolación y Esperanza, marquilla de techo de palio,bases de palio y nudos en madera de cedro. Y para su recorrido, el tramo de Cantareros entre San Luis y Comedias, en silencio para facilitar la presencia de niños con autismo.
El Lunes Santo, en San Francisco, día duro por el luto de José de Rojas Román, directivo y hermano mayor que fue de la Virgen de la Vera Cruz (cuyas páginas que estaban escritas las tendremos que dejar para el próximo año, al igual que al resto de difuntos que recordaremos en esta crónica improvisada). Reencuentros de los que fueron jóvenes estudiantes y de las nuevas generaciones con la misa a mediodía.
Ya por la tarde, la procesión más ordenada, donde se esperaba estrenar el bordado de la bambalina trasera exterior del trono de la Virgen, tercera fase del suelo del trono a cargo de Ángel Sarmiento. Y, otro año más, nuevas ropas de penitentes con la novedad que en el capuz se luciría el escudo de la Cofradía bordado.
Martes Santo en La Trinidad, con el recuerdo del trinitario Bonifacio y del que tantos años fuera puntal de la Virgen de la Piedad, Leonardo Ramos Palomo, cuyo hijo lleva su sitio. Mientras, en el Señor, se esperaba el estreno total del tallado del nuevo trono del Rescate y nuevas túnicas de los hermanacos. En San Sebastián, el Mayor Dolor, con besapié eterno, misa a mediodía en memoria de Andrés de Carvajal, antes del traslado legionario. Y por la noche, hubiera procesionado por primera vez la nueva imagen del Sayón que acompañará al Señor del Mayor Dolor en su trono, realizada por el artista Juan Vega.
Jueves y Viernes Santo: el Triduo Pascual y los días grandes de procesiones
Y con los días de fiesta, el Triduo Pascual, fusión de sentimientos, las familias y amigos se reúnen para visitar los templos por la mañana, almorzar juntos, ir a los oficios y ver las procesiones. El Jueves Santo, comienza el Triduo Pascual, aunque este año habrá que conformarse con la televisión y móviles.
En San Pedro, nuevos colores para el cuerpo procesional del Cristo de la Misericordia con el negro y rojo como tonos destacados. Y en la Virgen, nuevos candelabros terminados, y la Virgen del Rosario de plata, en miniatura en los pies de la canastilla. En Belén, los Servitas habrían estado esperando hasta última hora si llegaba el manto restaurado por parte de Sebastián Marchante. Lo que sí estrenarían era el marmoleado de suelo y marquilla nueva, así como redorado de la base de la peana, realizados por Comercial del Bricolaje.
Y llegamos al Viernes Santo. Multitudes hubieran llenado las calles que se dirigen a Santo Domingo, Santa María de Jesús y El Carmen para ver a los sagrados titulares en sus tronos. Oficio desde mediodía en San Sebastián para facilitar la asistencia de personas mayores y cofrades.
En los de Abajo, una de las grandes novedades hubiera sido el reestreno del manto negro de la Virgen de la Paz, gracias a la donación de Carmen Bueno, que antes de fallecer, donó el importe total de los presupuestos que le facilitaron de los dos mantos, la túnica y tres candelabros. Día de luto por ella, por el que fuera hermano mayor José Luis Vidaurreta, por el fotógrafo Francisco Durán y por el hermanaco Francisco Peramos. Santa Conserva había recuperado el destacado manto del siglo XIX de Antonia Palomo, que se complementaría con la nueva realización de una saya bordada en oro sobre lamé de plata.
Y en Jesús, se esperaba descubrir dos grandes azulejos para la fachada de salida procesional en el año de su 400 aniversario. Luto por el devoto León Moreno de Rojas-Sarrailler, que fallecía días antes del pasado Viernes Santo. En cuanto a novedades, 12 túnicas de penitente de cola más, la nueva saya de la Virgen, bordada por Sebastián Marchante Gambero, quien además ha restaurado el manto del siglo XIX de Luis Reynes Casadevall. Y entre ambas cofradías, ese bendito “encuentro” esperado, soñado y anhelado en la Plaza de San Sebastián. No es suficiente con la “despedida” en la “citarilla”. En la oscuridad de la noche, la Cofradía del Santo Entierro, donde Nuestra Señora de la Soledad hubiera ido acompañada por la música de Capilla “Ars Sacra” de Sevilla.
Y en el día sin procesiones, la Vigilia Pascual, que como en los últimos años, irían sumando más y más fieles, en los conventos a primera hora y en las parroquias a última. En la noche donde la vida vencerá a la muerte. Y ya el último día, el Domingo de Resurrección, el día grande (ojalá lo celebremos este año si se supera el estado de alerta o si no, el próximo año). Entre las novedades, las Religiosas Franciscanas de la Beata Madre Carmen que son las nuevas camareras, al dejar su cargo Francisca Vegas.
Se pondría fin a una semana donde los hoteles y restaurantes se hubieran llenado, los comercios aumentado sus ventas y Antequera hubiera sido sitio ideal para que Televisión Española y Canal Sur hubieran compartido sus imágenes. Mientras tanto, David Crespo hubiera hecho los resúmenes diarios para El Sol de Antequera, así como César Ruz, las transmisiones en directo vía streaming, junto a todo el equipo de El Sol de Antequera para haberle llevado todo detalle a casa, como hacemos con todas las noticias desde 1918. Éste era el propósito…
Información básica para el coronavirus
·Teléfonos exclusivos para el Covid-19 “coronavirus: 900 400 061 y 955 54 50 60 (Salud Responde).
· No usar el 061 ni el 112: Las autoridades piden que no se llame a esos números porque colapsan las centralitas e impiden la atención de otros casos en los que hay una urgencia vital. Los números a los que hay que llamar para consultar dudas y hacer preguntas sobre el coronavirus son el 900 400 061 y el 955 54 50 60 (Salud Responde).
· Qué es el coronavirus: Virus que circulan entre animales, pero que algunos pueden afectar a los humanos, el nuevo se identificó en China a finales de 2019.
· Los síntomas: Fiebre, tos y sensación de falta de aire.
· Prevención: Lavar las manos frecuentemente. Evitar tocar los ojos, la nariz y la boca. Al toser, cubrir la boca con un pañuelo desechable o contra el brazo con el codo flexionado. Con síntomas respiratorios, evitar el contacto próximo con otras personas.
· Con síntomas: No acudir al Hospital, sino llamar a los teléfonos indicados: 900 400 061 y 955 54 50 60 (Salud Responde).