Las cofradías y asociaciones religiosas van volviendo a lo que fueron hasta 2019, aunque se notan los acompañamientos de devotos y el uso de mascarillas en el cuerpo procesional, sobre todo entre los hermanacos.
Esta vez fue el turno para la Asociación de Fieles de María Auxiliadora de Antequera que celebró su Triduo del martes 24 al jueves 26 de mayo con misas a las 19,30 horas en la iglesia parroquial de San Pedro, para concluir con la procesión el viernes 27.
La imagen salesiana recibió la devoción de sus devotos y fieles, muy arraigada en el Barrio de San Pedro y entre las familias vinculada al querido colegio salesiano.
A las 20 horas del viernes, salía con los últimos rayos de sol recibiendo a la Virgen, la procesión de María Auxiliadora. Abría una cruz con dos ciriales, seguidos de la bandera y el guión de María Auxiliadora, en cuyo guión iba la comunidad de religiosos salesianos y la presidenta del colectivo, Virtudes Pérez Romero, acompañados por las tenientes de alcalde Ana Cebrián (que representaba al alcalde Manuel Barón) y Teresa Molina, la presidenta de la Agrupación de Cofradías de Semana Santa Trinidad Calvo, entre representaciones de hermandades de Gloria y Pasión.
Seguían dos filas con devotos alumbrando con cirios, un grupo de monaguillos y cuatro acólitas turiferarias con dalmáticas, precediendo al trono. José María Torres Zurita fue su hermano mayor de insignia al frente de 42 hermanacos, la mayoría vinculados al centro salesiano.
Tras la Virgen, devotos alumbrando y la Escuela de Música del Rocío de Málaga que ha entrado con buen pie y música en las procesiones de nuestra ciudad.
El trono fue decorado por Francisco Pérez de Floristería Emi, mostrando su experiencia y arte en la forma de decorar los tronos, a base de clavel rosa y statice lila con los que supo dar el efecto de los colores rosa y celeste de la Virgen; así como una guirnalda con rusco y flores surtidas también en rosa y celeste. Y en los centros, lisianthus blancos y gerberas rosas.
“Arriba” dedicado a Jaime Abad, hermanaco que había sido de María Auxiliadora que acompaña desde el Cielo a la Virgen, como lo hace también Manuel Sánchez, pilar fundamental de la asociación junto a su mujer Carmen Carrasco.
El sol acarició el bello rostro de la imagen que partió por San Pedro, Cruz Blanca, Lucena y entrada triunfal por Duranes, donde se notó el “gen estudiantil” y mecieron de categoría al son de las marchas musicales.
Llegada a la puerta de la iglesia de San Francisco, Trasierras, Botica, Juan Casco, Lozana, San Pedro y regreso a la Plaza de San Pedro. Decoración en balcones de estampas de la imagen mariana y de paños con los colores azul y rosa. Varias petaladas por casas de cofrades y devotos.
Era el regreso de la procesión de María Auxiliadora que ha estado dos años sin poder organizarse. Al grupo de antiguos devotos, se les suma la de los jóvenes estudiantes y profesores o antiguos alumnos del centro educativo salesiano, donde veneran a María Auxiliadora.
Y recorrido final por estrechas calles en busca de bendecir a su barrio y poder llevar a María a la puerta de las casas de muchos vecinos que la tienen todo el año en su parroquia.