Otra vez los últimos segundos, de nuevo en una acción discutida por los locales. El caso es que el Dólmenes Antequera perdió 26 a 27 ante el Trops Málaga.
La diferencia entre una plantilla que tiene lo que puede y una que aspira a ascender a Asobal, no se vio en el marcador. Los derbis provinciales entre Chispi y Quino Soler forman ya parte de esas leyendas entre equipo de la capital y de Antequera.
El líder venía para sumar. El Dólmenes Antequera para ganar. Y lo que hubiera sido un apretado empate, volvió a terminar en derrota.
La igualada de Martín Molina en el último ataque dejaba pocos segundos en el marcador y tras un discutido lanzamiento de Alberto Castro, no se le paró y subió el gol de la victoria.
Vamos al partido. Con el 2 a 1 de Alberto Ruiz desde los siete metros, se sabía que la igualdad iba a ser la tónica. El Trops pronto dejó claro su triángulo en el centro de la defensa: Soriano, Javi García y Alberto Castro.
Con un 5 a 5 en el minuto 10, se mostraba lo que quedaba por llegar. Fran Alarcón que para y da seguridad, Antonio Pérez Chica que coge el puesto de Jota y Nacho Moya que avisaba que iba a ser su partido.
Pero aparece Igor Karlov, que fue el máximo anotador visitante con 7 tantos, y aprovechan para adelantarse y conseguir un 8 a 12 en el minuto 20. Un parcial de 0 a 3 lleva a tiempo muerto de Chispi.
Los locales que saben que pueden y los visitantes que se les nota incómodos y como si se paralizaran ante el Dólmenes.
13 a 14 en el descanso y en la reanudación, los locales que se animan y surge un espléndido Nacho Moya que sumó ¡11 goles! Le entraba todo y durante la segunda mitad, el marcador o era favorable por un gol o empataban.
Quino Soler cambia de porteros, entra Villarreal por Villamarín que tiene dos grandes paradas, una a Nacho Moya y otra a Pérez Chica.
Llegan los últimos cinco minutos y los fallos en dos siete metros y los de Quino Soler que se vienen arriba y se colocan con un 24 a 25 a favor tras el tanto de Manu Díaz.
Tiempos muertos en ambos banquillos para decidir el último minuto. Con un 25 a 26 se llega a los últimos 30 segundos. El argentino Martín Molina empata y el pabellón que se viene arriba.
Pero a falta de 3 segundos, Alberto Castro recibe un balón, nadie le para y no falla, 26 a 27. Victoria para el Trops Málaga con la queja local a los árbitros protestando que hubo falta antes del lanzamiento final.