Tras la Real Feria de Agosto y entre medias, las Fiestas Patronales, este lunes 10 de septiembre, los colegios abrirán sus puertas para recibir a los niños de Infantil y Primaria que comenzarán su educación y ya no terminarán hasta que concluyan su formación.
En otros muchos casos, son el presente, los que este año terminen, y el futuro continuo de los que lo harán en los años sucesivos. Llegado el caso, quienes estamos ya fuera de la Enseñanza, ¿somos conscientes de la importancia que tienen los años de colegio? Creemos que no. Muchos de los problemas del día a día, se ciñen a la mala Enseñanza (de las leyes, obviamente no culpa del profesorado y los centros en sí), los pocos valores que se transmiten en la Educación.Si ya no existe casi la palabra respeto, educación, saber estar, ayuda, comprensión, perdón… en un hogar, en las familias, en los colegios educativos, en el trabajo… ¿cómo van a existir en los trabajos, organismos y en el día a día en la calle?Creemos que lo que pasa en nuestra sociedad es fruto de no saber cómo engrasar la convivencia desde pequeños.
Por un lado, creemos que el egoísmo es cada día más que evidente. Como una vez nos dijo un profesor: “Vivimos en una sociedad en la que el niño nuestro queremos que sea el Niño Jesús en Navidad, Don Carnal y Doña Cuaresma, capitán de fútbol, y el solista del coro de la clase…”. Y si no lo es, criticamos, cuestionamos al que así le corresponde.¿Qué pasó de lo de pensar en el otro, en el bien común? Solo hace falta mirar cualquier noticia política, ¡miren, busquen! Si mi partido gobierna en Madrid, no hay tanto paro. Si cambia de tornas, sí lo hay.
Y así en todas las cosas que existen.No es la primera vez que lo decimos, y tememos que no lo será la última. Hoy ya no hay un Gobierno Central, otro en Sevilla, esas llamadas Diputaciones o nuestros ayuntamientos. Hoy lo que priman son los colores, de los partidos y de los lazos amarillos.
¿Habrá un ministro, una ministra de Cultura que delegue en los profesores y centros educativos y universitarios en trazar las leyes educativas? ¿Se pondrá tanto empeño en reducir las listas de espera para el médico de cabecera, las resonancias, las mamografías o los TAC?¿Leeremos en Twitter o Facebook que los políticos se reducen el sueldo al mínimo interprofesional? ¿Se convocarán oposiciones anuales para dar posibilidad de plaza a los que acaban la carrera? ¿Se reformará la figura del funcionario para que Larra y su ‘Vuelva usted mañana’ pase como un recuerdo de la Literatura y no siga presente siglos después?
Cuestión de empezar desde pequeños, dando la responsabilidad a los padres de la Educación y a los centros de la Enseñanza. El problema es que los colegios no pueden hacer a la vez de maestros, padres y defensores del menor cuando en la sociedad no hay ya quien se entienda.Si padecemos esto después de haber crecido en familias luchadoras y trabajadores. ¿Qué les espera en el futuro a los hijos que hoy crecen en este ambiente enrarecido? En todos está la solución. ¿Quién se anima?
