Antequera se puso en el mapa internacional gracias a aquel 15 de julio de 2016 cuando fue inscrito el Sitio de los Dólmenes de Antequera como Patrimonio Mundial de la Unesco.
Desde el 10 de julio se debatió en Estambul, Turquía, todo lo que se llevaba a aquella convención que se ha quedado presente para nuestra historia, la que se cambió con ese martillazo y sí para nuestra ciudad.
Antes de ese momento que fue a las 15,33 horas; la embajada antequerana mantuvo conversaciones previas con muchas autoridades, como ésta en la que se ven al alcalde Manuel Barón y la entonces consejera de Cultura Rosa Aguilar, con el subdirector general de Cultura de la Unesco, Francesco Bandarin y la representante de la misma, Nuria Sanz, una persona clave en ese camino que se emprendió hace tiempo y que tuvo aquel día, su recompensa.