Hay que resaltar la satisfacción que produce en cualquier docente la oportunidad de intentar despertar la curiosidad en el alumnado, sin que importe la edad de las personas con las que se trabaje. El año que hemos acabado une a dos autores que hablan en su obra sobre esta palabra, al ver en ella el verdadero sustento en el que se basa la educación. Hemos finiquitado un 2017 que aunó en cierto modo por la muerte a dos autores a los que es anhelo de conocer les marcó la vida.
Por una parte y tal vez sin la merecida relevancia, se cumplíó el 50 aniversario de la muerte del Azorín, autor al que nuestra literatura debe bastante por su novela en prosa milimétrica. Escribía Azorín que “la vejez llega cuando se pierde la curiosidad”. Coincidía así con las palabras del filósofo hispano-hindú, fallecido en el pasado abril, Salvador Paniker al apuntar que “la juventud no se mide por los años que se tiene, sino por la curiosidad que se almacena”.Casi se podría ironizar al pensar que los dos superaron la barrera de los noventa por su enorme curiosidad.
Partiendo de esta premisa es obvio afirmar que en el Centro de Educación Permanente Ignacio de Toledo, más que con personas adultas trabajamos con chavales, como niños y niñas a los que las curiosidad no hace sino olvidar otras tareas y problemas para acudir a un centro en el que poder dar respuesta a necesidades de conocer otras cosas y entre ellas, especialmente el patrimonio de una tierra que les une.
Ese es el sentido de la web creada antequeradesdedentro.com, un espacio desde el que aprender y publicar lo se aprende. Un conocer la Antequera que hemos recibido desde la óptica de lo que tenemos, pero con el compromiso de difundirlo aprovechando las oportunidades de los nuevos tiempos con la universalidad que da la red.
Tal vez sea esta la razón por las que el proyecto que se realiza con el Plan de Patrimonio, aprendiendo y curioseando la historia y la cultura antequerana o andaluza haya sido reconocido con el sello europeo “EuropeFor Culture”. Un eslogan: Donde le pasado encuentra el Futuro regulado en España por el Ministerio de Educación, Cultura y Deporte. Estamos todos de enhorabuena y más contentos que unos chavales. A los niños nunca ha hecho falta enseñarles a ser curiosos…
