Si me lo hubiesen preguntado hace una treintena de años seguramente les hubiera respondido… «de los blancos». Esto es, del Real Madrid. Quizá por aquello de que cuando les veía jugar retransmitidos por la «caja tonta», el blanco era el color… más limpio y alegre.
Luego llegaron los colores… Ahhh, difícil elección. He de reconocer que el azul siempre fue mi color preferido, pero a ser posible ese azul que queda en el Cielo de Andalucía, una vez ha concluido el paso de una gran borrasca y cuando el frío viento del Norte ha barrido con fuerza todas las nubes y la helada nocturna está prácticamente asegurada en la Vega.
Y el fútbol en general sin distinción de equipos comenzó a parecerme apático y me resultaba totalmente indiferente verlo que no verlo. Además les dejaba camino abierto a los demás miembros de casa, (pues a nadie más les ha gustado nunca el fútbol), para que hicieran uso de las distintas opciones televisivas. Habíamos dejado atrás ya la TVE y el UHF y comenzaba la era de los mandos a distancia.
En éstas y… con un Mundial copando los horarios y espacios deportivos de casi todos los medios de comunicación, alguien aún me espetaba días atrás: ¡Vosotros los del Real Madrid…!
Perdón…. yo no soy del Real Madrid, tampoco del Barcelona, yo sigo siendo forofo del mencionado azul del Cielo de Andalucía, despejado… o con los restos de nublos que gentilmente regaron las papas, ajos o la ya madura mies, a su paso por las fértiles tierras de la Vega. Grises nubes las cuales suelo observar (siempre que me es posible), desmembrándose al paso por la cima del Camorro Alto en la hora crepuscular, asentado cómodamente a orillas de las Siete Mesas en el Torcal Alto. Estas encrespadas nubes parecen dibujarme entre los rojos anaranjados del lejano horizonte, las siguientes palabras que siempre procuro recordar en los momentos más duros, en los debatidos con más energía, en las exageradas controversias entre aficionados a unos y otros colores.
Éstas no son otras que: TOLERANCIA, RESPETO Y ACEPTACIÓN.
Por fortuna vivimos en días de Democracia, por tanto, por qué no habría de hablarles también algo de Fútbol. Cierto es que en estos días estamos asistiendo a los Mundiales de Fútbol y mi deseo cómo no, es que gane el mejor y que el mejor sea nuestra Selección.
Posdata: Para aquellos que desconocen el mundillo de los controles antidoping aquí les dejo una dirección de Internet http://www.rfef.es/index.jsp?nodo033 donde puede apreciarse al modo y manera tal, para que nadie dude de que en fútbol también se realizan controles antidopaje.
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