Mi nombre es Marta Muriel Serrano, soy usuaria del Centro Ocupacional de ADIPA. Hoy quiero contarles lo afortunada que soy por la gran oportunidad que me ha dado la vida y principalmente este centro al que pertenezco.
Sí, tengo mi discapacidad pero… ¿quién dice que no puedo desempeñar un trabajo? Desde hace un año comencé a trabajar en ayuda a domicilio en la empresa Serainant. Es mi primer trabajo al que estoy totalmente dedicada. Cada día asisto a prestar mi ayuda y compañía a mi usuaria a la que le estoy muy agradecida por aceptarme y acogerme como una trabajadora más, sin ponerme barreras y aceptándome tal y como soy.
Ahora sí puedo decir que se lo que es tener un trabajo y lo que conlleva, cosas como dedicación, responsabilidad, puntualidad y entrega. Me siento feliz y realizada por tener cada día una misión importante que desempeñar.
Ahora conozco la inclusión sociolaboral, y puedo decir desde mi experiencia que es real y posible.
En todo momento me he sentido querida y valorada por mis compañeros, sobre todo por los de mi taller ocupacional al que pertenezco, mi monitora y, como no, mi gran apoyo familiar que día a día demuestran su entrega y confianza en mí.
Hoy quiero servirles de ejemplo y demostrarles que la “disCAPACIDAD es la capacidad de ser extraordinariamente capaz”, seamos constantes y dedicados para demostrar que SÍ somos CAPACES.
Ojalá llegue el día en el que desaparezcan los prejuicios y todas las personas con discapacidad puedan llegar a tener mi oportunidad.
Gracias a los profesionales de ADIPA que me guían y prestan su apoyo en este camino para lograr la INCLUSIÓN SOCIAL.