Con toda una vida por delante, el pasado 2 de diciembre recibíamos la triste noticia del fallecimiento de Fernando Romera Burgueño, quien con 52 años nos deja huérfanos de ese arte y elegancia que atesoró en su vida y en su tienda, Romera Modas. Siguió los pasos de su padre, transformándola de una sastrería a un lugar especializado de moda con la especialidad de los trajes y ceremonias.
Romera ha vestido a cientos de hogares antequeranos y de la comarca, en ese día tan especial. Muchas de las fotografías de bodas, comuniones o celebraciones especiales tienen su sello. Su recuerdo quedará al pasar por calle Cantareros, mirando al interior por si sigue de pruebas con unos clientes o preparando el escaparate.
Fernando era elegante, trabajador, incansable, ponía sus ojos en vestir lo mejor posible a cada persona que entraba por su tienda. Desde aquí, nuestro pesar a su esposa, Inmaculada Roldán Carrégalo, a sus hijos y demás familia. Se nos va Fernando, quien estará diseñando la colocación de las estrellas para adornar de una manera extraordinaria estos días de Navidad.