No hay semana que no te enteres de una persona que empieza una lucha contra diferentes enfermedades, en la que en muchas ocasiones las supera, pero las hay que en cualquier momento, te comunican lo peor, su fallecimiento.
Es lo que nos pasó este jueves 4 de octubre cuando a primera hora, la ciudad conoció que tras tiempo batallando, se nos fue tras su lucha, María Pilar Moreno Arcas, añorada médica de Urgencias del entonces Hospital de San Juan de Dios, luego especialista en Urología en el nuevo centro hospitalario, del que fue jefa de servicio.
Con tan solo 59 años nos dejaba, tras una vida dedicada su pasión: su trabajo. ¿Cuántas vidas habrá salvado? ¿Cuántos diagnósticos, operaciones, tratamientos, seguimientos habrá realizado en su vida dedicada a la Medicina? Y ahora, tanto que sembró, no pudo recogerlo para que le ayudara a seguir adelante.
La iglesia mayor y colegial de San Sebastián la despidió en la tarde del jueves 4 de octubre, ante el dolor de sus padres, hermanos, sobrinos y amigos, además de compañeros y pacientes que quisieron estar con ella en su despedida. El arcipreste Antonio Fernández exponía su sorpresa porque aunque sabía de su lucha, no esperaba el fatal desenlace. La recordaba como una hija que acompañaba a su madre a las misas de los sábados tarde, en esa pasión que tenía por ellos y la esperanza que ella transmitía.
En un mundo cada vez más globalizado, se nos van perdiendo los recuerdos de lo que fuimos, la esencia de la ciudad que nos vio crecer, como la que formaba el Hospital de San Juan de Dios que supo llevar un equipo de profesionales, casi todos de la tierra, que lo dieron todo para que los antequeranos estuvieran lo mejor atendidos, y Pilar es y será uno de esos referentes que recordaremos. ¡Gracias por todo lo que hiciste; y ahora te toca ayudar desde el Cielo a que se logre combatir esas enfermedades que acaban muy pronto con nuestras vidas! Descansa en Paz.