Hay personas que dan vida a los sitios, como es el caso de Sor Sagrario, quien durante los últimos 39 años ha sido ese “ángel de la guarda” de generaciones y generaciones de niños que entraron sin apenas hablar, y salieron hechos y derechos para regresar, primero con sus hijos y, ahora con sus nietos, buscando siempre la “mano” de la eterna portera de su Colegio.
Sor Sagrario Iglesias Quirós (Turón, 1932) llegó a Antequera allá por septiembre de 1977, estando desde entonces al cuidado de la portería del Colegio, con los más pequeños, atenta a las necesidades de los padres, a velar cómo iban creciendo; y todos ellos, siempre la buscaban para compartir con ella cómo les iba en sus estudios, en casa, en sus vidas…
¡Cuántos secretos tuvo, cuántas alegrías y tristezas se ha llevado! Desde la alumna que la visitaba vestida de novia, hasta cuando le pedían abrir para mostrarle al hijo recién nacido; hasta esas lágrimas que compartía cuando las cosas no van bien y llegan a padecer y sufrir en esta vida. Sor Sagrario mantenía vivo el espíritu de Madre Carmen, siempre atenta a quien le necesitaba para entrar al colegio, a clase, a la Capilla, a la Escuela de Teología…
Y, aunque la considerábamos inmortal (con 83 años, seguía igual que siempre), tras unos días hospitalizada… subía al Cielo este miércoles 10 de agosto, siendo trasladada a su Colegio de La Victoria, donde su congregación, sus alumnos, sus amigos, Antequera entera, pasó para despedirse de una buena mujer que puso su vida a disposición de Dios, siguiendo los pasos marcados por Madre Carmen.
Impresionante el contraste del llanto por su pérdida con la alegría de saber que ya comparte la nueva vida. La misa funeral y su entierro del jueves (indescriptibles los aplausos al despedir el féretro de su colegio), así como las muestras de afecto y pésame, colapsaron las redes sociales, mostrando el cariño que se le profesaba.
Descanse en paz, Sor Sagrario… Madre Carmen le habrá dicho: “¡Bendito sea el Señor que tanto nos quiere!”. ¡Siga cuidando de nosotros y de los pequeños!