Cuando las fotografías sepia cobran vida, damos un salto en el tiempo, como ocurre al visitar la fábrica artesanal de Mantecados La Perla.
Desde 1937, tres generaciones regentan este obrador de horno de leña donde fabrican artesanalmente los destacados mantecados de canela, almendra, café, chocolate y limón, roscos, alfajores, entre su gran variedad llena de sabores.
La campaña comienza a inicios de octubre hasta mediados de diciembre, y su venta depende de la cantidad que haya en sus almacenes.
Antonio Navarro Berdún fundó la casa que luego mantuvieron sus hijos Antonio Matilde y Carmen Navarro González. Hoy la lleva José Antonio Navarro Guerrero.
Venta en Andalucía
Pasear por Antequera estos días es ver a turistas y visitantes ir con bolsas repletas de mantecados de La Perla, lo que hace que su tienda de calle Mesones sea un punto casi peregrino cada Navidad.
En Antequera, también los venden en el Mercado de Abastos y en La Castellana, y fuera de la ciudad, en comercios de Málaga, Sevilla, La Línea de la Concepción, Jerez, Motril, Salobreña…
Todo para dar salida a las exquisiteces de los afamados mantecados dobles de canela, roscos de vino y anís, polvorones y mantecadas, sus productos que adornan las mesas familiares.
La Perla
· Desde: 1937.
· Fabrican: Desde octubre a diciembre.
· Propietario: José Antonio Navarro Guerrero.
· Producción: 72.000 kilos.
· Trabajan: 30 personas.
· Productos estrella: Mantecados dobles de canela, roscos de vino y anís, polvorones y mantecadas.
· Dirección: Calle Mesones, 26.
· Horario: De lunes a viernes de 9 a 13,30 y de 15 a 20 horas. Sábados de 11 a 13,30 y de 16 a 19 horas y domingos de 11 a 13,30 y de 16 a 18 horas.
· Teléfono: 952 84 13 91.
· Web: www.mantecadoslaperla.com
Mantecados “La Perla”, la opinión de Juan Benítez
Cuando en la primera entrega de esta serie, hablé de la costumbre de comprar pocos mantecados, sobre todo dobles de canela, para probarlos, en Antequera en la mitad del siglo pasado, dejé para hoy decir que en muchas ocasiones la fábrica ganadora de la campaña era “La Perla”. Luego, durante los meses de campaña, eran muchas personas, antequeranas o venidas de fuera, las que preguntaban por la fábrica ya que eran muy solicitados sus productos.
Curiosamente, esta fábrica, que nació en 1936 y que ya tiene cumplidos, sus primeros 75 años, correspondería a las Bodas de Brillantes, sigue haciendo sus mantecados de la misma forma.
Hay una foto en la fábrica, que la exhiben en la página web, que demuestra que, salvo las personas y el color, lo demás es exactamente igual, pese a los años que han transcurrido. La fábrica sigue la tradición familiar, la fundó un tío abuelo del actual propietario, que se llamaba Antonio Navarro Berdún y aún lo elaboran de forma artesanal y al estilo tradicional, casi no han evolucionado en tecnología moderna, porque prefieren hacerlos como siempre lo han hecho y siguiendo la tradición familiar.
Tienen a gala traer sus ingredientes de muy cerca: la mayoría de Estepa, ciudad de gran tradición también en mantecados y que ellos dosifican y destilan en casa. Interesante es saber que la canela viene directamente de Ceilán, y se cuenta entre la familia que un año a punto estuvieron de quedarse si poder fabricar porque la canela la detuvieron en la aduana. Se resolvió pronto el problema y pudieron fabricar con total normalidad.
Al contrario de otras fábricas de mantecados de Antequera, ellos sí que recomiendan algunos, sin dejar de elogiar las cualidades de los demás y son conocedores de que hay preferencias en puntos de fuera de Antequera por algunos de sus productos. Así, en Cádiz y Sevilla prefieren los “Roscos de vino”; Gibraltar se inclina por los “Roscos de anís” y Málaga por los “Mantecados dobles de canela”.
Creo no errar, si afirmo, aunque sólo sea una opinión personal y que coincide con las tradicionales recomendaciones de la fábrica, que en Antequera los preferidos son las “Mantecados dobles de canela”, las “Mantecadas de almendra” , los “Polvorones de almendra” y los “Alfajores de almendra”.
Sobre todo, se destacan éstas por su sabor especial, su tostado peculiar, sus trazas pequeñas de almendra que las podemos encontrar en la boca al comerlas, su regusto a canela y, en el caso de los roscos, por su sabor a clavo.
Muy curioso, porque encaja en la tradición popular, en la elaboración de dulces de Navidad que se hacía en las casas y que se llevaba al horno de leña, es el “Mantecado de canela” emborrizado de huevo. Lo recuerdo cuando se hacía en casa y cómo al salir del horno tenía una textura especial y el huevo les daba un gusto peculiar.
También es muy agradable al sabor y de gusto exquisito la “Mantecada de canela”. Productos todos ellos tradicionales y de raigambre antigua. Más información, edición impresa sábado 12 de diciembre de 2015. (pinche aquí y conozca dónde puede adquirir el ejemplar) o suscríbase y recíbalo en casa o en su ordenador, antes que nadie (suscripción).
