En Antequera, Qbaila, tiene ya, sonido propio. Qbaila es, una Asociación de Baile con actividades y talleres encaminados a la enseñanza de distintas formas de expresión corporal, así como las propias dirigidas a la mejora física como la Zumba y Zumba Gold, Ballet, o las propias latinas, Salsa Cubana, Salsa Línea, Rueda Casino, Bachata…
En los días finales del pasado mes de enero un grupo de componentes de Qbaila asistíamos al Congreso, denominado Festival Almuñécar Baila, organizado en la vecina población de la costa Tropical granadina. Cita donde acudieron: salseros, kizomberos, bachateros de Andalucía, Melilla y otras ciudades. En este encuentro se impartieron talleres, (clases), con ponentes y profesores nativos y otros de la tierra con una ya larga trayectoria, en cada una de las especilidades que compusieron el Congreso.
Ellas son: Sandra Paradas García, Ana Ruiz Lara, Miriam Jiménez García y Sara Larrubia Valle y forman parte de la Asociación Qbaila. Estas guapas antequeranas, componen el conjunto: Son Arará.
Es un grupo de cuatro chicas, como les decía, con una instruida facultad dentro de la modalidad de salsa. Estas lindas chicas de la ciudad del Torcal y los Dólmenes milenarios, combinan sus estudios y trabajos personales, con la práctica y enseñanza del baile. Ellas participaron en el Congreso, impartiendo un taller denominado: Estilo Chica, o, “Lady style”, donde se les enseña a las chicas a controlar su cuerpo, a mover e incluir en el propio baile y o expresión corporal, las distintas partes, como brazos, cuello, caderas, encaminado a mejorar la técnica y estilo, para que el baile en pareja, sea mucho más cómodo para ambos y la chica luzca más.
Personalmente me tenía por una persona ágil, con reflejos y una cierta capacidad física merced a los años de práctica del ciclismo, pero les puedo asegurar, por experiencia propia, que todo ello quedó por los suelos el día en que por curiosidad, me acerqué a una de las actividades de salsa impartidas en Qbaila.
El reto estaba servido, aprender a bailar. Salsa y… ya puestos, cualquier otra modalidad, hay que recuperar el tiempo perdido en el desconocimiento de éstas expresiones corporales tan didácticas, educativas y sumamente divertidas. La educación del oído, la interpretación musical, el trabajo de memoria coreográfica está siendo superada, no sin un cierto esfuerzo físico.
Y les aseguro que todo ello tiene su recompensa. Actividad realizada, concluida y asimilada, satisfacción que compensa. Y… en Qbaila, todo ello es posible.