El tradicional besapié al Señor del Rescate del primer viernes de marzo, trae este año una novedad: quienes acudan de 17 a 21 horas, podrán donar sangre en el propio templo conventual, tras una iniciativa de la Cofradía del Martes Santo y de la Orden Trinitaria.
Como cada primer viernes de mes, el templo trinitario abrirá sus puertas para rezar al Señor, dejar una limosna y besar sus pies, pero además quien así lo desee, podrá donar sangre de 17 a 21 horas.
El hermano mayor de la cofradía, Francisco Peláez desea que este año «qué mejor forma de ayudar a los demás que ofreciéndole un bien tan preciado como nuestra sangre, un elemento que ayuda mantener la vida a centenares de personas en nuestro entorno cada día».
Ambas instituciones han promovido esta iniciativa con el Centro Regional de Transfusión de Sangre de Málaga, lo que les ayudará a sus campañas de recogida en el autobús que visita periódicamente la calle Infante don Fernando.
Se prevé que ante las largas colas de antequeranos y visitantes que acuden cada año a La Trinidad, quienes voluntariamente así lo deseen, mientras esperan su turno, pueden ofrecerse para donar sangre para quien lo necesite.
La devoción del Señor del Rescate tiene sus orígenes en el Cristo de Medinaceli de Madrid, que en el siglo XVIII fue trasladado a Mámora (Marruecos) para culto de los soldados españoles, imagen que fue confiscada en 1681 por los musulmanes y los trinitarios la mandaron rescatar, regresando a Madrid en 1682.
Desde entonces, todos los años, el primer viernes de marzo, recibe la devoción del pueblo en diferentes puntos de España, entre ellos Madrid, Málaga y Antequera, bajo distintas advocaciones distintas, como la del Señor del Rescate, que no solo recibe gran devoción ese día, sino también el Martes Santo, siendo la imagen que más devotos congrega en Semana Santa.
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