Recordamos hace años los anuncios en televisión, prensa y radio del tabaco y el alcohol; lacras y vicios que por suerte, con el tiempo, se prohibió su publicidad. Algo que ahora se debería aplicar en esas infinitas casas de apuestas que nos rodean día a día, sobre todo, si nos acercamos al Deporte, y al fútbol, más en concreto.
Las casas de apuestas a través de internet han proliferado a diario y vemos continuamente infinidad de anuncios que se cuelan a la hora que sea por nuestra televisión. Además, lo hacen con distintos personajes que conviven en nuestra sociedad con nosotros: actores, presentadores, deportistas… Todos se han subido al carro del juego y eso, es muy peligroso.
Nos preguntamos si en algún momento, al dinero seremos capaces de ponerle límites, porque es tal cantidad de circulación del mismo que cuando se quiera parar, serán muchas las personas que ya no puedan dar marcha atrás a su ludopatía.
El juego es peligroso y no nos vale que en cada anuncio que vemos, abajo en la pantalla en pequeñito llegue la advertencia del mismo: juegue con moderación y para mayores de 18 años. ¿En serio?
Le ponemos solo un ejemplo. El pasado domingo, partido entre el Barcelona y el Valencia. En el descanso del mismo, sin contar el inicio y el final, se emitieron hasta 5 anuncios de casas de apuestas. Además, con los presentadores, alentando a ello gracias a la publicidad que se le paga. Muchos de los equipos de fútbol, los tienen en sus camisetas como patrocinadores. Todo eso está al alcance no solo de mayores, sino también para los niños que ven los partidos de sus equipos cada semana y entre medias, ven a sus ídolos rodeados de riquezas anunciando el juego.
Los límites en este sentido deben exigirse ya, pero claro, hablamos de un deporte, el del fútbol de elite, que ya se ha convertido en un auténtico negocio y donde cada día impera más esto.Y si nos vamos a categorías inferiores, solo tenemos que mirar los cientos de casos de supuestos amaños de partidos gracias a esas apuestas fraudulentas que existen en los fondos de este mundillo.
Sumemos además la facilidad con la que uno puede llegar a jugar hoy día. En los teléfonos móviles, ordenadores y tablets solo hay que darle a un botón para iniciar el juego y poner los números de la tarjeta de crédito, que cada día va sumando el mismo, aumentando así las ganas de jugar con el consiguiente peligro que conlleva.
La sociedad está permitiendo crecer a nuestros jóvenes adictos a todo ello sin poner impedimento alguno. ¿Serán nuestros políticos capaces de poner límites a ello? Solo hay que ser valiente para frenar lo que va a ser una lacra en el futuro de muchos de ellos. Lo que no podemos permitir es ver a figuras como Vicente Del Bosque este verano en pleno Mundial de Fútbol, anunciando una famosa casa de apuestas. O cuando figuras como Piqué, Neymar o Cristiano Ronaldo lo hacen con el póquer. ¿De verdad necesitan de esta publicidad para vivir tranquilamente? Creemos que no.
