Cuando se celebran 50 años de la institución de Cáritas Diocesana de Málaga –cuya exposición podemos contemplar del 11 al 20 de diciembre, en el Ayuntamiento de Antequera–, he recordado que, a finales de septiembre de 1966, don Antonio López Benitez, don Salvador Montes Marmolejo, don Antonio Ramírez Mesa y el que esto suscribe tomamos posesión de las parroquias de San Sebastián, San Juan, Santa María con sede en la iglesia del Carmen y Santiago.
Habíamos trabajado juntos en el Seminario: don Antonio López como Rector y nosotros como formadores,y fuimos enviados a crear una Residencia Sacerdotal en la Parroquia de San Sebastián. No habían trascurrido tres meses desde nuestra llegada cuando don Antonio López publica, el 25 de diciembre, en el Sol de Antequera, en el subraya que el “amor de Dios en Cristo Jesús ilumina a todo hombre”, y, tras recordarlos datos del hambre en el mundo, anuncia que ante esta realidad, aunque en Antequera sea a escala menor, no podemos permanecer indiferentes los cristianos, y puntualiza: “Por este motivo estamos organizando una Cáritas permanente de servicios interparroquiales, para realizar y aunar esfuerzos, e ir remediando los casos más urgentes que se vayan presentando”.
Don Antonio era un hombre efectivo, por eso, el 15 de enero de 1967 anuncia que ya se ha creado Cáritas Interparroquial de Antequera, y expone la Organización, Formación, Acción, Recursos e Información de la misma.El 5 de febrero, vuelve a escribir sobre Cáritas Interparroquial, para dejar constancia de su balance: 35.062 pesetas de ingresos y 49.685´50 pesetas de gastos. Aún recuerdo que muy pronto surgió la necesidad de hacer reparaciones y mejoras en casas pobres. Y que se creó una cuadrilla de albañiles que trabajaron muy bien.