Atrás quedaron, con la nostalgia de todo lo pasado, las fiestas alegres, inolvidables para muchos, de la Navidad. Y con ellas, los buenos propósitos que nos comunicamos los unos a los otros, en clara demostración de que hay que agarrarse a esas mejoras que anuncia el Gobierno, por tímidas que parezcan, y responder poniendo cada cual de nuestra parte lo que proceda.
El primer en sumarse a esos propósitos ha sido el Ayuntamiento, que anuncia “de una tacada” iniciativas interesantes, como para que quien tenga dudas se decida. Así, se bonifica el IBI a familias numerosas; se bonifica la licencia de apertura de establecimientos según el número de nuevos contratados que se realicen; para aquellos jóvenes menores de 35 años, para mujeres que inicien, por primera vez, la actividad o la apertura de un establecimiento; para personas discapacitadas que tengan certificado de minusvalía expedido por el órgano correspondiente de la Junta de Andalucía; para los desempleados de larga duración; para ganaderos que pongan en marcha, actualicen o regularicen sus explotaciones, siempre que se incluyan instalaciones…
Por otro lado, consciente de lo que representarían las obras del Puerto Seco –años y años paralizadas cuando cuentan con lo principal que es la financiación por empresas interesas—se urge a los concejales de IU a que medien ante sus compañeros de la presidencia de la Junta, para que solventen las dificultades que están impidiendo desde hace años que se pongan en marcha, cuando podrían crear tantos puestos de trabajo tanto en las obras como en su funcionamiento.
En fin, en diciembre se puso en marcha otro plan de pago por 1,21 millones de euros a proveedores y pequeñas empresas.
Es decir; que el Ayuntamiento está buscando soluciones y poniendo en marcha cuando está a su alcance, con lo que da el primer paso que ahora deberá seguir todo el que pueda, consciente de la importancia de sus acciones y de su repercusión, pues es claro que la crisis no se supera si no es trabajando, y para trabajar lo primero que hay que tener es dónde.
Los comerciantes antequeranos, “tiran”, en muchos casos, la casa por la ventana y en esta época de Rebajas –como pueden consultar en este mismo número en la sección comercial correspondiente—hacen malabarismos con los precios de coste para ofrecer productos de moda, de calidad, de garantía, a precios imbatibles. También habría que responder a ese esfuerzo eligiendo Antequera, y sus comercios, para proveernos de todo aquello que necesitamos y dejamos precisamente para estas fechas en razón a los precios más bajos del mercado, que encontraremos precisamente aquí, sin necesidad de ir más lejos; sin salir de Antequera, sin usar los coches u otros medios de transporte, con la garantía que dar el tener tan cerca los establecimientos que nos permitirán ajustas tallas o gustos o colores o modelos.
Comprar en los comercios antequeranos, les dará vida y hará que se pueda generar un “movimiento” de esos comerciantes a otros sectores de la vida local.
En fin: nos prometimos felicidad y bienestar; pasemos del dicho al hecho.
