Vecinos de Antequera padecen, al menos desde el viernes 25, unas nuevas visitas de un grupo de supuestos profesionales que buscan casa con personas mayores para practicarles el conocido como «fraude del gas», que consiste en entrar en las viviendas, hacerles supuestamente la revisión oficial y cobrarles un dinero superior al que se tiene fijado en 69,50 euros.
Así, incluso a algunos les han llamado por teléfono como suelen proceder las agencias oficiales (sin entender cómo disponen de esa base de datos), por lo que los estafados les abren las puertas. Tras un tiempo revisando la instalación, les presentan una documentación para que la firmen y a algunos les han pedidio hasta cerca de 300 euros.
Hay quienes al no tener tanto dinero, le han dado desde 35 a 150 euros y «nos dijeron que el resto lo lleváramos a la empresa del servicio oficial», nos expone uno de los afectados. Al menos hay ya quejas y denuncias de unos diez afectados en los últimos días.
https://www.youtube.com/watch?v=eyUtOpV-aWI
Recomendaciones de Inagás, el servicio oficial de Antequera
Ante ello, desde el Grupo Inagás de Antequera (el conocido como Butano Gallardo) insiste en que no caigan en la trampa. Las revisiones son cada 5 años, con la fecha que viene en la goma, le mandan una carta primero, luego le avisan por teléfono unos días antes y se identifica el personal autorizado al llegar a casa.
Ante la duda, llame al 952 70 27 14 o al 952 84 09 58 para saber si son técnicos oficiales o no en la zona de Antequera. O si no puede, sepa que el precio actual es de 69,50 euros, ni más, ni menos. Parece que el dichoso virus se hace inmune ante la técnica de «las estafas de gas», que siguen presentes, sobre todo en domicilios de personas mayores.
La empresa oficial pide precaución, llamar para comprobar que son oficiales, y si son estafados, que presenten su queja ante la Oficina del Consumidor del Ayuntamiento Antequera.
En algunos de los casos, se trata de empresas creadas para servicios de fontanería que juegan entre lo legal y lo ilegal, al entrar con el consentimiento de los vecinos, firmar y aceptar un presupuesto y pagar una supuesta factura, por lo que en algunos casos eluden responsabilidad.
El problema es que los propietarios creen que están siendo atendidos por unos profesionales y que el servicio les garantiza la instalación, cuando no está respaldada por la compañía de gas. Y sobre todo, que de los 69,50 euros que cobran actualmente por una revisión normal, les piden entre 150 y hasta 300 euros.
Afectados y familiares de los mismos quieren que se sepa que están actuando para evitar que sean engañadas más familias y que no se olvide por si pasan unos días sin venir y vienen en unos meses como suelen hacer.