En siete días nos hemos cargado la ilusión del año nuevo. Al final, ¿será el 2021 mejor que el 2020? De nosotros, de cada uno, depende. Percibimos que hemos perdido el sentido común y el vivir en comunidad. Hoy no hay paletas de colores: hemos pasado del sí al no. Recuerdo, los que crecimos en la EGB, que las calificaciones eran: sobresaliente, notable, bien, suficiente y suspenso.
Pues hoy en la vida se aprueba o se suspende, las cosas las ves blancas o negras, estás conmigo o contra mí. Es un problema muy complicado y que se tienen que arreglar desde lo más pequeño, el entorno familiar; hasta lo más grande: las representaciones institucionales.
Lo que pasó en el 2020: la pandemia y la mascarilla, nos llevó a pensar en la de libros, series y películas que darán a los diferentes géneros. Tras lo de Estados Unidos, ya no sabemos ni lo que decir ni pensar.
Lamentablemente hoy ya no es problema que una persona mayor no tenga una plaza de residencia, que incrementen los casos de cáncer, alzheimer y obesidad. Que el suicidio y ansiedad sean las consecuencias en 2021 de lo padecido en 2020. Que un elevado porcentaje de autónomos y trabajadores se vean sin nada tras esta nueva crisis.
Hoy, lo que importa es llevar la razón, aunque no la tengas. Ya no gobiernas, gestionas, organizas… ¡impones! Las redes sociales entran en una nueva etapa. ¡Hasta a Donald Trump le censuran ya mensajes! Lo visto en el Capitolio es algo muy serio.
Intentando ver el lado positivo de las cosas y tomarse con humor circunstancias que nunca imaginábamos ver… nos quedamos con la comparación de una chirigota de Cádiz en Estados Unidos o que es más fácil entrar al Capitolio que a un centro de salud.
¿A dónde nos lleva esto? Quienes somos usuarios de redes sociales, algunas veces tenemos que decir o nos aconsejan: ¡déjalo ya! Pero, ¿y quiénes no tienen acceso a ellas? Creemos que ha llegado la hora de legislar su uso, al menos que al igual que tienes un DNI, un organismo tenga registrado el usuario que hay detrás.
Si presumimos de Democracia, ¿qué problema hay de saber quién hay detrás de un perfil? ¿Tan complicado es dar tu opinión, comunicar o comentar con respeto tu consideración?
¿Por qué hay que ser tan directo, escodiéndose en el insulto, la comparación o alentar a insurrecciones como las vividas en Estados Unidos?
Mientras, los laboratorios de investigación van consiguiendo que las vacunas de la COVID-19 se vayan aprobando y desarrollando. ¿No debería ser lo más importante vacunas a toda la población mundial y apoyarles para que consigan más vacunas para otras pandemias silenciadas o que no están en el día a día?
Cuestión de prioridades mientras estamos narrando nuestro día a día. ¿Cómo recogerá la Historia lo que estamos viviendo? Si cuando estábamos en la EGB, llegaba un paréntesis en la Guerra Civil; si los Godos y Reyes Católicos se cuestionaron más tarde… ¿se imaginan la Historia de España en el 2020 contada por cada comunidad autónoma?
Mientras, 8 de enero cuando escribimos estas líneas y no sabemos cómo será el 2021 porque ya no nos sorprende nada. Atrás quedan los años de una vida ordenada donde la Naturaleza o la vida la alteraban. Hoy, esos fenómenos extraños se llaman los teclados de un móvil donde las redes sociales pueden ser el mayor enemigo de la sociedad mundial.
