Las buenas relaciones Ayuntamiento-Universidad de Málaga, o si lo prefieren alcalde Manuel Barón-Rectora Adelaida de la Calle, han tenido nuevo reflejo en el Campeonato Europeo Universitario de Fútbol Sala que mañana se clausura.
Antequera ha acogido a 600 deportistas, procedentes de 20 países europeos que, aparte el torneo deportivo, dieron una nota de color a la ciudad. Quizá los efectos de lo apretado de los presupuestos haya impedido actos con más lujo, pero lo que se ha hecho, se ha hecho bien, sin caer en la tentación de gastar lo que no tenemos.
Por eso nos quedamos con lo evidente: 600 deportistas que habrán tenido ocasión de completar su objetivo deportivo, con visitas a la Ciudad que, según nos confesaba algún universitario extranjero, goza de una fama más que merecida, fama que había visto plasmada en la realidad más absoluta, por el contenido natural, histórico y artístico de una ciudad andaluza, ejemplo de tantas cosas. Y lleno total en los hoteles…
La Universidad de Málaga, ha recibido una nueva muestra del apoyo de Antequera que ojalá sirva para resolver nuestras necesidades y deseos ante dicha Institución: contar con nuevas Escuelas Universitarias, ser sede de Cursos de Verano, de Prehistoria, a la Naturaleza, los mundos Romano y Árabe, el Barroco, la Historia de Andalucía, cuya conformación actual parte de Antequera en 1410, y sigue hasta los siglos XIX y XX.
Alegría, la de ese informático antequerano Fernando del Pino, que mosqueado por la avalancha de votos que recibía “la competencia del Torcal” en la guía Repsol, descubrió el comportamiento más que dudoso de un alcalde que incitaba a sus vecinos a crear páginas falsas para aumentar sus votos, o el de ese “hacker” que metía los votos por cientos, de un tirón. Denunciado el caso donde había que hacerlo, las cosas vuelven a su sitio y El Torcal, arriba. ¡Así se trabaja por Antequera!
Pero estas gratas noticias tuvieron dos contrapuntos: el dolor de los antequeranos, como el de todos los españoles, por la tragedia de Santiago, espantosa y agrandada por las imágenes de nos iban llegando y que justifican estos tres días de luto oficial, y la sorpresa ante la “dimisión” del Presidente Griñán.
Se va un Presidente que, por cierto, vino una sola vez en su anterior mandato y en víspera de las elecciones, a inaugurar el Museo de la Ciudad de Antequera, pero que no volvió para nada y lo que es peor no tuvo tiempo de recibir a nuestro alcalde que quería plantearle diversas situaciones que la ciudad atravesaba. O no le interesaban los asuntos de Antequera o no tenía tiempo, pero en dos años…
Mientras, imágenes grandiosas la de ese millón de jóvenes de todo el mundo concentrados en Brasil para las Jornadas Mundiales de la Juventud, a las que acudió ese Papa bueno, sencillo, afable, que es el Pontífice Francisco. Ese millón de jóvenes, llevarán a cada uno de sus países las conclusiones de estas Jornadas y las recomendaciones y bendiciones del Papa.
