El mundo del Arte nos tiene guardadas verdaderas sorpresas entre las múltiples vertientes que abarca, y la fotografía, está entre ellas. Ahí recalan un importante grupo de profesionales que son capaces de dar ese toque diferenciador que convierte una instantánea en una obra de arte, éste es el caso de las fotografías de Albert Pamies Corominas.
Este fotógrafo profesional, recibía hace unos días un nuevo premio internacional a su carrera, y ya van seis en los cuatro años que lleva volcado en ella. Los “Fearless Photographers Awards” están avalados por grandes profesionales de prestigio en el mundo de la fotografía, y seis veces han premiado ya una imagen de Albert, fotografías de bodas, campo en el que se ha especializado.
No es nada fácil este premio “primero te tienen que aceptar desde ‘Fearless Fotógrafos’, precisamente su nombre es ‘fotógrafos sin miedo’ que indica que tiene que ser una fotografía muy diferente a lo tradicional. Una vez que estás dentro, debes seleccionar las mejores fotografías e ir pasando los distintos “rounds” que tienen hasta el final. Ser premiado es muy difícil por el hecho de que hay miles de fotógrafos en todo el mundo y muchos de ellos con mucho prestigio, son muy reconocidos y que te premien, ya es bastante complicado”.
Si hay algo que caracteriza sus fotografías, especialmente las premiadas, es que son distintas a las habituales. “Es un tipo de fotografía diferente, un punto de vista más moderno, muy distinto a lo que estamos acostumbrados a ver. Y este premio lo que valora es el atrevimiento en hacer cosas distintas, no quedarse en la típica fotografía de bodas, sino ir más allá”.
No se trata de imágenes de bodas habituales, pero es complicado hacerse a la idea de cómo un Licenciado en Historia del Arte, ha terminado volcado en esta rama profesional. “El mundo de la imagen ha estado muy ligado a mí. El decidir que iba a ser fotógrafo fue de la noche a la mañana. Un día un compañero me enseñó a un fotógrafo que le gustaba mucho. Vi esas fotos y me parecía increíble que esas fotos fueran de boda. Me sorprendió tanto, que vi que se pueden hacer muchas cosas, sobre todo, en un campo de la fotografía que estaba muy estancado en España. No es fácil poder plantearte un proyecto a largo plazo y que sea algo que realmente te gusta, y si es un trabajo que te llena, es aún mejor. Poder vivir de tu pasión es una gozada”.
Y lo hace a la perfección, consiguiendo una complicidad que se transmite al observar la imagen: “Me gusta implicarme emocionalmente con lo que hago. Si tengo una pareja delante no puedo fotografiarles si no les conozco, si no me implico con ellos. Sé lo que quieren, lo que les hace reír, lo que les gusta, lo que no. Cuando comprendo todo eso, es cuando sale la fotografía que yo quiero y a ellos les gusta”. Tarea nada fácil “lo que busco es que la fotografía transmita; si quiero eso, primero soy yo el que debo conectar, si no lo consigo, difícilmente mi fotografía va a transmitir algo”.
Pero Pamies también trabaja en otros campos, no sólo en bodas. “Siempre me ha gustado el trato con la gente, el ver su reacción en las fotos, como en retratos y fotografía infantil. Toda fotografía que se convierta en algo divertido, me encanta”.
Esto se nota con sólo hablar de cada fotografía premiada o cómo se vuelca en los proyectos. Si no conocen su trabajo, paseen por su web
www.albertpamies.es, les sorprenderá gratamente, donde el trato con el otro, marca la imagen que él es capaz de captar.