La Orquesta de Ópera y Ballet Nacional de Noruega tiene un nuevo integrante, Antonio José Vera Escribano, un antequerano al que le apasiona la Música y que un día descubrió que “probando suerte” también se acierta.
“Quise tomar ese reto, así que me metí en una web donde vienen ofertas de trabajo de orquestas” y encontró justo lo que mejor sabe hacer, trompetista solista, ni más ni menos que para la Orquesta de Noruega. Así que, sin pensárselo dos veces, envió su currículum.
Y fue preseleccionado para acudir a la primera de las audiciones en Frankfurt (Alemania) a finales de noviembre del pasado año, donde realizó dos rondas de la que finalmente sólo seis trompetistas pasaron, entre ellos el antequerano.
Tras esa primera gran prueba de fuego, Antonio José Vera tuvo que realizar la última y ante la mirada atenta de decenas de personas que se reunieron en Oslo el pasado 6 de enero: “En la primera ronda tuve que tocar un concierto y una serie de solos y en la segunda ronda, yo pensaba que iba a ser como siempre, pero cuando entré me encontré a 70 músicos…”.
“¿Un sueño? El que acabo de conseguir”
Ahora, le esperan unos meses de prueba con la Orquesta en Noruega, donde, si todo sale tal y como está previsto, puede incorporarse definitivamente en septiembre.
Sobre su estancia en Oslo, destaca que su vida “cambia radical: para empezar, porque aquí estamos a 20 grados y allí a menos 20”. Aunque no es sólo eso, también deja aquí a su familia y la ciudad que lo vio nacer: “No quiero desligarme de Málaga ni de Antequera, es mi sitio, donde yo quiero acabar algún día cuando sea más viejecito”.