Con esfuerzo, ilusión y mucho trabajo, cinco jóvenes antequeranos están dando mucho que hablar en el fútbol modesto. Militan en las filas del Club Deportivo Casabermeja, que se ha convertido en la casa futbolística de este ‘grupillo’.
Son llamados cariñosamente en el vestuario como el ‘Coche de Antequera’ y han sumado su granito de arena a la consecución del ascenso a Primera División de Honor Senior de este humilde club malagueño, que ya mira a la Tercera División.
Lejos de los focos de las televisiones, los estadios majestuosos y los contratos millonarios existe otro fútbol, el que solo se mueve por el amor a un deporte. Es este último el que está provocando que cinco jóvenes antequeranos estén triunfando en el Club Deportivo Casabermeja, que ha logrado este curso el ascenso a División de Honor Senior.Lejos de los focos de las televisiones, los estadios majestuosos y los contratos millonarios existe otro fútbol, el que solo se mueve por el amor a un deporte. Es este último el que está provocando que cinco jóvenes antequeranos estén triunfando en el Club Deportivo Casabermeja, que ha logrado este curso el ascenso a División de Honor Senior.
Ellos son Pablo Cala (26 años), José Antonio Fernández (21 años), Manu Díaz (21 años), Fran Palomino (20 años) y Guille Artacho (27 años). Todos iniciaron su aventura futbolística en la cantera del Antequera Club de Fútbol y ahora se muestran agradecidos por la oportunidad que les brinda el Casabermeja de seguir disfrutando del fútbol: “En la comarca de Antequera hay equipos con los que puedes seguir disfrutando del fútbol, ya que en Antequera es más difícil. El Casabermeja es un buen club, trata muy bien a la gente y eso es fundamental”, explica Pablo Cala.
En la parcela deportiva, el éxito ha sido rotundo, consiguiendo el ascenso a División de Honor Senior, algo muy complicado debido a que tan solo sube el campeón del grupo, hecho que remarca aún más el buen hacer de este humilde club malagueño, su plantilla, y por supuesto, los cinco antequeranos que forman parte de ella. “Esta categoría es muy difícil porque no hay opción de liguilla. Pierdes dos partidos, quedas segundo, has hecho una gran temporada pero te quedas sin premio”, apunta Fran Palomino. En este sentido, Guille Artacho confía en que el club siga creciendo y superando más retos: “El objetivo es luchar por estar arriba y llegar a Tercera División en el futuro. El club está trabajando muy bien”.
Constancia y trabajo, la fórmula del éxito
En cuanto a los ingredientes de la consecución de este genial resultado, los cinco antequeranos coinciden: “La clave ha sido la constancia, el trabajo y el buen nivel de la plantilla. Que vayamos 22 tíos a entrenar, algunos de fuera, con frío, lluvia y sin fallar es muy complicado. La recompensa es merecida y los números así lo dicen”.El primero en abrir la veda de antequeranos en las filas del Casabermeja fue Pablo Cala hace ya tres temporadas. Le siguieron José Antonio Fernández, Manu Díaz y Fran Palomino. El último en llegar fue el preparador físico, Guille Artacho. “Poco a poco, nos estamos haciendo con el control de aquello”, bromean entre risas.
Respecto al ambiente que se respira en el vestuario y cómo ha sido acogido este grupo de antequeranos, todos aseguran que es idóneo: “Los de Casabermeja nos acogen bien, al final todos somos de pueblo y nos ayudan en todo y eso también suma a lograr el objetivo. Y el entrenador también es muy trabajador y hace unos entrenamientos muy profesionales”.
Con sacrificio y trabajo, el ‘coche de Antequera’, como es conocido en el vestuario, recorre los 27 kilómetros de carretera que separan Antequera de Casabermeja (ida y vuelta) cuatro días a la semana con la misma ilusión de unos chavales que empiezan a descubrir su gran pasión: el fútbol. Más información, edición impresa sábado 26 de mayo de 2018 (pinche aquí y conozca dónde puede adquirir el ejemplar) o suscríbase y recíbalo en casa o en su ordenador, antes que nadie (suscripción).
