El comercio Perfumería La Estrella es uno de los más veteranos de nuestra ciudad. Pocos como él han sobrevivido durante muchos años a todos los vaivenes que el día a día ofrece.
El conocido establecimiento ha estado regentado por Rosario Ramírez García, que tras toda una vida de trayectoria profesional se ha jubilado y disfruta de un merecido descanso.Esta incansable profesional nos hace balance de todos estos años al frente de su negocio: “Agradezco a todos mis clientes el haber podido dar el servicio que les he dado, ya que cuando me quedé con la tienda lo que había de alta cosmética estaba todo recogido en una caja de hilos. Todo mi afán ha sido comprar y mantener marcas selectivas y eso cuesta mucho dinero y trabajo”. “También como esteticista he realizado durante muchos años limpiezas de cutis en el salón de belleza que teníamos en calle Alameda”, añade.
Muchos han sido los momentos vividos, pero la gerente de La Estrella se queda con: “Precisamente con el servicio tan selecto que se le ha dado a todos y cada uno de mis clientes de Antequera y pueblos que componen la comarca. He de decir que en cuanto a los complementos he llegado a tener clientes fijos de abanicos que venían de Sevilla. Encontraban aquí lo que no encontraban allí que es la cuna de estos”, explica.
Una jubilación para descansar
Para Rosario supone algo de tristeza el tener que dejar el negocio para afrontar la jubilación: “De hecho ya tenía que estar jubilada, pero he decidió mantenerlo un poco más porque a raíz de tener dos tiendas había mucho género y lo que he tratado es de vender la mayor parte de él”.
Ahora Rosario va a dedicar su tiempo libre a: “Muchas cosas… Ahora lo que no tengo es un horario fijo para nada, pero estoy invirtiendo el tiempo en descansar y en estar más tiempo en mi casa del campo con mi marido y con mi hijo” . Un merecido descanso para una incombustible comerciante.
El futuro del comercio
Las nuevas tecnologías unidas a la pandemia ha hecho que el futuro del comercio tradicional se tambalee. Según Rosario: “Lo veo un poco negro. Primero porque las nuevas generaciones no buscan calidad ni servicio y adquieren lo primero que ven… La gente antes apreciaba mucho el buen servicio… Además, están influyendo mucho las compras que se realizan a través de internet y más ahora con la pandemia que todo el mundo compra por las plataformas digitales”.