sábado 20 abril 2024
InicioOpinionesEl síndrome del cuidador

El síndrome del cuidador

El 5 de noviembre se celebra el “Día Internacional de las personas cuidadoras”, en este día se rinde un más que merecido homenaje a aquellas personas que se dedican al cuidado de personas mayores o en situación de dependencia, sean cuidadores familiares o profesionales.

El cuidador facilita la vida de la persona dependiente ayudándole en todas aquellas tareas en las que ha perdido autonomía: tareas domésticas, aseo, alimentación, desplazamiento…

Llamamos cuidador o cuidadora primario o principal al que asume la mayor responsabilidad del cuidado y le dedica la mayor parte de su tiempo a la persona dependiente, actuando por lo general de forma solitaria, renunciando en muchas ocasiones a su ocio, intereses, amigos, resto de familiares (hijos, pareja…) y a su propio cuidado.

Cuidar a una persona dependiente puede ser, a pesar de las dificultades, una experiencia muy satisfactoria y gratificante dado que se contribuye a que la persona a la que se cuida se encuentre bien y se recibe el agradecimiento de la misma. 

No obstante, cuando el cuidado se prolonga en el tiempo y no se cuenta con ayuda, la persona cuidadora primaria experimenta un profundo desgaste emocional y físico que puede desembocar en importantes problemas de salud. Aparece el cansancio, el agotamiento, el estrés, la irritabilidad, el insomnio, la pérdida de apetito, la hostilidad encubierta hacia la persona dependiente, la culpa por sentir dicha hostilidad, la rabia, la impotencia ante las situaciones difíciles de manejar, el sentimiento de abandono por parte de otros familiares que no prestan su ayuda, el resentimiento hacia el resto de posibles cuidadores que “se lavan las manos” y que además no reconocen el esfuerzo que se realiza cada día, la dificultad de concentración, la apatía, la ansiedad, la depresión y el abuso de sustancias nocivas. 

Una de cada tres personas cuidadoras primarias experimenta este síndrome del cuidador.  Para prevenir y tratar este síndrome es importante que la persona cuidadora siempre cuente con ayuda familiar e institucional. Debemos cuidar al que cuida.

Más información edición digital www.elsoldeantequera.com y de papel.
¡Suscríbase y recíbalo en casa o en su ordenador, antes que nadie (suscripción)
 
NOTICIAS RELACIONADAS

Más recientes