Volvemos como los turrones en Navidad, pero no a casa, a la calle, volver a llamar la atención de viandantes, transeúntes, vecinos y forasteros que nos visiten. El rastrillo solidario Antequera Une estará, como en las ediciones anteriores, lleno de luz, color, armonía, trabajo bien hecho, agradecimientos a muchas personas anónimas, buenos precios y recubierto de una buena capa de protección que se llama prójimo. Es por y para Antequera, para parchear un poco más, y si se puede mejor, las grietas de la desigualdad, pequeñas carencias que no llegan a las instituciones, y, que en caso de hacerlo, no siempre pueden ser correspondidas y para que su Navidad llegue con un poco de esperanza y calor.
Y las pedigüeñas, que llevamos la batuta de la organización, andamos siempre de acá para allá buscando todo lo que precisamos para hacer de nuestro sueño una realidad. Hemos recorrido algunos locales, por la amabilidad y generosidad de sus dueños, y este año, ocurre lo mismo. Susi y Amadeo, de la prestigiosa firma David Morán, nos ha cedido el local de la Alameda. La popular zapatillera Cumbre. Entre terracitas y bullicio inauguraremos el próximo 3 de diciembre a las cinco de la tarde, la hora del té, de los taurinos, de las reuniones y las partidas de cartas, y cómo no, de la copa de champán y la foto de familia.
