viernes 22 noviembre 2024
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Llegó la hora de abrirnos al Turismo

Ya somos Patrimonio Mundial. ¿Y ahora qué? Pues tenemos por delante más trabajo del que creemos. Si queremos que la ciudad aproveche la distinción de la UNESCO, hay que trabajar ya entre todos. Conocemos que hay ya organismos, instituciones y ciudadanos que lo hacen, pero se precisa un involucramiento total.
 
¿A dónde va el turista? A los hoteles y restaurantes, ¿están preparados, conocen las excelencias de la ciudad Patrimonio Mundial? Se ofrecieron cursos y se manda información, pero ¿es suficiente?
 
¿Camina por las calles y preguntan? Creo que todo antequerano de a pie, suele ser parado por algún visitante que le pregunta por un sitio, dónde comer o qué visitar. De ahí la importancia de difundir lo que somos y atesoramos a todos los que vivimos en esta tierra.
 
¿Está todo cerrado? Es una leyenda urbana, que se intenta combatir, pero aún está por conseguir. Si Antequera atesora tantas iglesias, por ejemplo, ¿por qué no hacer un calendario como las farmacias de guardia? Por ejemplo, primer fin de semana de mes, abren San Agustín, Jesús, San Pedro y La Victoria, por citar algunas. El segundo, otras, y así hasta completar el mes. De esta forma, si pasan por Santiago, estaría abierta una de las tres iglesias del lugar; si van por la Cruz Blanca, que lo esté La Trinidad, San Pedro o San Francisco.
 
Sería potenciar iniciativas como Luz de Luna durante todo el año. Ser Patrimonio Mundial ha abierto una nueva ruta, la que comunica los hoteles y el casco histórico con el conjunto dolménico, por lo que hay que atender la demanda.
 
Ser Patrimonio Mundial no es como una medalla, un cuadro que nos regalan y lo miramos diciendo: “¡Qué bonito queda!” en el rincón de mi cuarto. Ser Patrimonio Mundial debe ser compartirlo con el mundo, con quienes nos visitan. Y para ello hay que saber lo que tenemos, enseñarlo y hablar de maravillas.
No podemos contar lo negativo, los rumores, los malos hechos del lugar, sino creernos lo que somos, lo que presumimos y ahora potenciamos. En definitiva, Patrimonio Mundial es de todos, y entre todos debemos trabajar y buscar cómo mejorar y aprovechar el incremento de turistas.
Más información edición digital www.elsoldeantequera.com y de papel.
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