La Real Feria de Agosto de Antequera tal y como la conocemos hoy en día, hereda lo que antaño se vivía en nuestra ciudad: un legado que recogemos haciendo un repaso por las ferias que compartieron nuestros ciudadanos hace 100 años, en 1922 y la de hace 75, en 1947.
Diferencias existen muchas, porque eran tiempos donde la feria del ganado marcaba las mismas, ya que era el origen de la misma como muy bien dictaba la orden de Fernando VI de permitir su celebración. Junto a esta venta de ganado, también existía la agrícola, pero también la parte de diversión en los circos y Plaza de Toros, así como la música que acompañaba en el Paseo.
Hace 100 años, Antequera, al igual que toda España, seguía recogiendo las consecuencias de la Guerra del Rif, el gran desastre de Annual que seguía marcando el acontecer diario. Seguía recaudándose dinero para aquella Guerra, que como recoge nuestro periódico en la edición del 6 de agosto de 1922, marcaba el gasto de “cuatro millones de pesetas cada día”, una cantidad que señalaba como “la ruina”, ya que se subían impuestos y contribuciones.
A pesar de estas circunstancias, que seguro afectaban a todos los ciudadanos, se vivió la feria del 19 al 24 de agosto, iniciándose y acabando la misma con quema de fuegos artificiales gracias al pirotécnico Macías. Nuestro periódico, una vez pasadas estas fiestas, recoge “que en este año y des-pués de un período de franca decadencia, han vuelto a manifestar señales de vida, que es la propia vida y desarrollode la ciudad”.
Una ciudad, que se aprestaba ya a vivir con entusiasmo la próxima coronación de la Virgen de los Remedios.Prosigue este resumen señalando el aumento de la presencia de forasteros “más que en los dosaños anteriores. Hoteles, fondas, posadas y casas de comidas, han estado repletas de personal; y todos los establecimientos públicos se han visto y deseado para servir al público que los invadía”.
Mencionan nuestras páginas la buena acogida de los espectáculos gracias al Teatro Circo, donde actuaron “con gran éxito, la renombrada compañía de zarzuela y opereta del maestro Rada, que se ha visto favorecida por el público durante la temporada de su actuación, algunas noches con seis secciones, que eran otros tantos llenos. Los circos “Alegría” y “París” también han hecho buena feria, como igualmente la variada serie de espectáculos de menor cuantía, propios de estas fiestas”.
En el capítulo de los espacios donde se desarrollaron las fiestas, el Paseo, entonces de Alfonso XIII, ocupó un papel importante “se ha visto concurridísimo por la mañana y noche, de ocho a once, en que la banda de música municipal amenizaba el paseo con escogidas piezas de su repertorio”. Así como añade “la bonita y profusa iluminación eléctrica del citado paseo”.
Eso sí, hubo varios días de deslucimiento debido al “fuerte viento reinante en los días 20 y 21, y la lluvia del 22, deslucieran algo nuestros festejos, aunque el público deseoso de expansionarse no se arredraba ante esos accidentes e invadía el paseo y lugares de espectáculos”.
Y la parte importante, nuestras páginas hacen referencia a las ventas del ganado, con especial hincapié a las transacciones ya que “no han sido tan numerosas como el deseo de venta manifestado, y los precios en general bajos. Se han pagado las yeguas a 750 pesetas, los mulos de 800 a 1.000 pesetas,los toros a 1.000 pesetas y la arroba de ganado de cerda, de 18 a 20 pesetas”.
Igualmente, escriben nuestras páginas sobre las exposiciones de útiles agrícolas, así como de maquinaria de la Casa García Berdoy; la máquina de vapor de Luna y automóviles del señor Lora, de la marca “Spor”.
Los toros no se quedaron atrás, con corrida el día 21 a beneficio del asilo Capitán Moreno con toros de Fernando Villalón, para Francisco Martín Vázquez y José García “Alcalareño”, que se lució en banderillas.
La Feria de 1947 ,tres días con toda la población en fiesta
El paso del tiempo se ve con marcado acento en la Feria de Antequera de hace 75 años, la de 1947, donde la posguerra se nota en toda la vida diaria de la ciudad, siendo la Real Feria, reducida a sus días fijos en el calendario desde 1748, del 20 al 22 de agosto.
Pero no por ser breve, a pesar de que nuestras páginas la califican de no haber “tenido nada extraordinario, como atractivo de forasteros y de diversión popular”, nuestra feria no iba a ser menos, porque a la vez la dignifican como que “es una de las más bonitas de Andalucía” ya que “nos lo afirman los hechos y lo confirman multitud de referencias de personas extrañas a nosotros. En animación, alegría, vistosidad y tipismo, pocas hay que la igualen, y en ciertos aspectos supera a las de algunas capitales de provincia y a las de muchos pueblos a la redonda…”.
En cuanto a los espectáculos y los bailes que se ofrecieron, “a pesar de los precios”, fueron en la caseta La Peña y en el Círculo Recreativo y estuvieron animados: “Las gentes, dispuestas a divertirse y sin temor al dispendio –¡quejándose todos de lo caro que estátodo, y gastando a pesar de ello, todo lo que pueden– se han lanzado a la calle y han venido del campo y pueblos próximos en gran número; ytodo esto, como hemos dicho, sin ser extraordinarios sus festejos”.
En esta ocasión, se deja entrever que la feria de ganado ha cogido más peso en mayo que en agosto, aunque “ha abundado el ganado mular, vacuno y asnal”, donde también se incide en los precios: “Los precios siguen altos para toda clase de semovientes y reses”.
El día de la inauguración de la feria se pudo ver a las 11 de la noche con una gran quema de fuegos artificiales, además de las dianas y conciertos de ese día y el resto por parte de la Banda de Música de Antequera dirigida por el Maestro Mohedo.
En la feria, hubo carrera ciclista con recorrido de 62 kilómetros con salida de nuestra ciudad para ir hasta la localidad de La Roda y vuelta a Antequera. Quedó en primer lugar Rafael Sánchez, de Málaga; en segundo, Palomeque, de Málaga; tercero, Joaquín Alarcón de nuestra ciudad; cuarto, Manuel Moreno, de Granada y en quinto lugar, Rafael Pena, de Antequera.
La corrida de toros con una gran taquilla el jueves 21 lidió un toro de Concha y Sierra, para el rejoneador Joaquín Pareja Obregón –con media estocada recibió la ovación del público– y seis reses de Isaías y Tulio Vázquez, para Morenito de Talavera –que sustituyó Juanito Belmonte anunciado en cartel, pero lesionado en San Sebastián–, no tuvo éxito en la lidia; Julián Marín, oreja y aplausos, y Luis Mata que debutó en nuestra plaza, cortando dos orejas a su primer toro.
En el último día, el viernes 22, de nuevo deporte con el partido de fútbol entre una selección de Sevilla y el Antequerano, inaugurándose la tribuna instalada en el Campo de Deportes. Ganaron los antequeranos por 5 a 4. En la Selección Sevillana jugaron: Alejandro, Duarte, Chipi, Leonardo, Duarte, Gómez, Oñoro, Guerrero, Bazán (2), Villarín II (1) y Marín (1). Y por parte local, lo hicieron: Bejarano (Crujera), Tejada, Viñolo (Berro), Carrasco, Portugués, Gabriel (Manolillo), Lerín, Baute (2), Pino (Americano), Americano (2), (Sevillano), y Cárdenas (1) (Sierra).
Así fueron las ferias de otras épocas, siempre marcadas por el momento social en el que se encontrara el país, y en concreto, la ciudad, pero siempre con ánimo en las calles y adornos en las mismas, hoteles y casas de hospedaje llenas para recibir siempre al buen visitante que tan grande hace a estas fiestas.