La malagueña del club Aquaslava Antequera, Patricia Bueno, se ha podido sobreponer a todos los elementos para cumplir su sueño de cruzar la línea de meta más codiciada por un triatleta, la de Kona, en el Mundial Ironman que cada octubre se disputa en esta isla de Hawaii. La joven de 23 años hizo un tiempo de 13 horas 25 minutos, entrando en meta en el puesto vigesimooctavo de su grupo de edad tras un auténtico suplicio en la carrera a pie con muchos problemas de rodilla por una tendinitis.
Sabedora de que iba a sufrir, Patricia se lanzó al agua dispuesta a hacer un segmento cómodo. Salió en 1 hora 7 minutos. Tras los 3,8 kilómetros de nado, se subió entonces en la bicicleta. Quedaban 180 kilómetros por delante, impuso el ritmo al que había entrenado, aunque el viento y la humedad hacían el trayecto complicado en algunos momentos, pero Bueno aguantó sobre la bicicleta para acabarla en 6 horas y 36 minutos. Quedaba entonces lo más complicado, la carrera a pie, nada más comenzar a correr ya notó que no iba a ser fácil. Momentos de carrera y muchos caminando, la rodilla decía que no, el corazón y la cabeza querían seguir hacia adelante, con la compañía siempre de Iván Tejero. Además se echaba la noche sobre Hawaii, oscuridad y una meta que no se divisaba. Pero Patricia Bueno siguió, con todos los ánimos de un club volcado en las redes sociales durante toda la noche, con el aliento de Iván Tejero y con los recuerdos de lo que ha sufrido durante todo el año entrenando, Bueno llegaba a la parte final, disfrutando del último kilómetro, cojeando casi, pero entrando en meta con una sonrisa y convertirse en finisher en Hawaii, toda una hazaña en la que el tiempo y el puesto son lo de menos.