A mi parecer así ha sido este año. Esta Gran Festividad de la Iglesia Católica, no ha llegado a la altura que se merece aquí en Antequera, en otras localidades siempre la sobrepasa. Por ejemplo: en ciudades como Cádiz, San Fernando y Sevilla, sus patronas la Virgen del Rosario y la del Carmen, así como San Fernando, Santas Justa y Rufina, San Isidoro, Leandro, La Inmaculada… procesionan junto a Jesús Sacramentado.
Además se montan grandiosos altares, incluso los ayuntamientos montan el suyo propio, para agasajar al Rey de Reyes y hacer mucho más grande este día, e igual se hace en Granada, Toledo y sin ir muy lejos, también en la vecina localidad de Casabermeja y en otras muchas de toda la geografía española.
Aquí en nuestra querida Antequera, esta festividad también fue grandiosa antaño, con su concurso de altares, sus calles alfombradas de aromáticas hierbas, sus veladas musicales la noche antes en la Plaza de San Sebastián y todo ¿para qué? Pues tan sólo para alabar y adorar a Jesús cuando pasara por las calles antequeranas.
La procesión salía mucho más temprano, pues sobre las 9,30 de la mañana ya estaba en la calle y sobre las 11 ó 11,30 había finalizado, pero la Santa Misa comenzaba a la 9,00 de la mañana y tan sólo llegaba a la consagración, momento en el cual la Sagrada Forma era llevada y colocada en la custodia, para su procesión y una vez acabada ésta y después de impartir la bendición, se finalizaba la misa y se daba la comunión a los fieles.
La procesión era la parte central de la Santa Misa, por eso en los altares se ponía y ponen los sagrarios con la puerta abierta, para hacernos ver que ÉL no está ahí. Lo que no se puede hacer es que una misa que comienza a las 9,30, acabe a las 11,00, pues a partir de esta hora, el calor comienza a hacer de las suyas y las calles en lugar de llenarse se quedan vacías.
Hay localidades donde la procesión o se hace temprano, o con la tarde ya muy caída para no coincidir con lo más caluroso del día. ¿Aquí por qué tenemos que ser tan diferentes?
Tan diferentes somos, que no llevamos ni banda de música y hay sitios donde ésta sale incluso para la procesión de enfermos e impedidos (Jesús Sacramentado en el copón y bajo palio).
Este año, el trono iba muy cargado de flores ¿Para qué tantas? ¿No hay dinero para música, pero sí para flores? Cuando lo que más le pegaría y así iba antes, es con mucha candelería de plata, velas y de adorno floral, la típica azucena y cerrando la procesión la Banda de Música.
Este gran día, si no queremos que se pierda, habría que darle un gran cambio y el Excelentísimo Ayuntamiento debería de implicarse un poco más en ello con un concurso de altares y también de escaparates, al estilo del que se hace para Navidad, Primavera… La procesión, al igual que antes, debería de llevar personas alumbrando delante y todos y cuantos acompañan a los diferentes guiones e incluso al Pendón, también deberían de ir con sus respectivas velas, de este modo todo sería mucho más solemne.
Santa Eufemia, debería de volver a presidir el gran altar desde el cual se imparte la Bendición a los fieles, y si Ésta ha de venir e ir con música ¿qué más da? Las cosas se tienen que hacer bien y no prohibir tanto, pues con esto no se llega a ningún sitio.
Nuestras autoridades eclesiásticas deberían hacer todo lo posible para que este día sea más grande aún si cabe y Jesús Sacramentado esté acompañado de más fieles, con prohibiciones, en lugar de ir ganando se va perdiendo. Y este gran día, tiene que seguir brillando mucho más que el sol. TODO LO QUE HAGAS QUE NO SEA PARA DIOS, NO ES PARA NADIE.