Nuestro periódico –“nuestro” Sol– no cesa de llevar a sus páginas a algunos antequeranos ilustres que dejan nuestro nombre bien alto: Antequera y Andalucía, es decir España. No quiero dejar pasar por alto otros nombres no antequeranos, pero españoles, al fin y al cabo. Algunos se van, dejando un sitio para los que llegan. Otros se van definitivamente. Me quiero referir en estas letras a Enrique PONCE (torero que se va), a los toreros que llegan, a los deportistas que ya están y a otros que llegan (Rafel NADAL, Carlos ALCARAZ), en tenis; Jon RAHM y Ángel HIDALGO en golf, por ejemplo.
Empecemos por Enrique PONCE. Lo ha sido todo en el mundo del toro. Dotado de una inteligencia excepcional vio con suma claridad que “aquellas monerías” que hacía con los novillos, dejaban de ser interesantes para aficiones serias. Y una lejana tarde, creo que fue en Arenas de San Pedro, aconsejado por otros cercanos al mundo del toro, decidió pasar al escalafón de toreros. Hizo bien, y lo hizo muy bien delante del toro-toro en todas las plazas en las que toreó, y durante años. Ahora ha decidido decir adiós a su manera: despidiéndose, con muchas salidas a hombros, de muchas de las plazas que le han visto triunfar en el pasado. Otros maestros de la tauromaquia, como ESPARTACO, se han ido más en silencio, aunque todos han dejado el nombre de España en gran lugar. RUIZ MIGUEL nos enseña tauromaquia desde las páginas de TV. Y hablo de España, porque estamos delante de la Fiesta Nacional. Emociona ver como en muchas de las corridas –grandes y pequeñas– que tenemos la ocasión de ver a través de nuestra televisión autonómica, suena el himno nacional antes de comenzar el festejo… Pienso en Francia y en cómo MACRON ha “blindado” legalmente la fiesta de los toros, para que ningún vaivén político pueda ir contra ella. Y esperamos que los nuevos toreros vayan a más… y las plazas españolas se llenen de aficionados jóvenes.
Pasando al mundo del deporte, podemos ver lo mucho que ha dado a España Rafael NADAL con su tenis. NADAL se “está retirando” a sus treinta y tantos años, tratando de cuidar sus lesiones y reservándose para determinadas ocasiones. Hay, afortunadamente relevo, con Carlos ALCARAZ, que –estoy seguro– dejará a España en buen lugar. Ya la está dejando…
Algo parecido ocurre en golf: Jon RAHM está dejando a nuestro país en muy buen lugar. Gracias a él, se habla de España. También acabará hablándose de España en esta especialidad, gracias a un Ángel HIDALGO, malagueño y andaluz, es decir español. Es así cómo hemos reunido un grupo de nombres españoles que dan brillo a España, sin proponérselo.
Así ha sido siempre: España nunca se ha propuesto que su nombre luzca entre otras naciones; tampoco se lo propuso a lo largo de la historia: nunca presumimos de nuestros premios NOBEL, y nunca presumimos de nuestras hazañas en el descubrimiento de otros mundos. Bueno es recordarlo ahora que, presa de un “nerviosismo histórico”, la nueva presidenta de Méjico no invita a nuestro Rey a su toma de posesión por no pedir perdón por las “atrocidades” cometidas por los conquistadores españoles…
A esta señora la invitaría a visitar “La Rábida”; puede que se emocionara al pensar cómo aquellos monjes guiaron a Cristóbal Colón; a ver la réplica de las carabelas, o a visitar Baiona en Galicia los primeros días de marzo en los que se conmemora la llegada a ese puerto gallego de la carabela “La Pinta”. La invitaría a visitar la reproducción exacta de la carabela, y a pensar un poco lo que aquella treintena de españoles “descubrieron” dando el salto al otro lado del mar…